El pasado 18 de diciembre, Laura Sarabia, la poderosa directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), fue noticia por partida doble. En la mañana, en la Escuela de Cadetes José María Córdova, fue condecorada por el presidente Gustavo Petro con la Orden de la Estrella de la Policía, “por sus actividades y trabajo en defensa de la paz pública y las instituciones democráticas”.
Con su medalla en el pecho, y mientras esperaba que terminara el evento, fue notificada que no muy lejos de ahí, en una audiencia, la exconsejera para las regiones Sandra Ortiz la salpicó en el escándalo más grande de corrupción del Gobierno Petro: el saqueo a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Con la voz entrecortada, y aguantando el llanto, Ortiz, quien para ese momento tenía un pie en la cárcel El Buen Pastor, aseguró que estaba siendo víctima de un complot orquestado por alguien muy poderoso de la Presidencia, que se codeaba no solamente con el jefe de Estado, sino con los ministros, la fiscal, la procuradora general y “con todas las personas más poderosas”.
“Esa persona que tiene mucho poder en la Presidencia es una mujer”, señaló la exfuncionaria, quien, en su exaltación, no coordinaba las frases. “Está al lado del presidente. Ella fue la que armó ese complot, señora juez. Ella fue la que armó absolutamente todo para que yo hoy estuviera acá”.
Esa primera descripción apuntó los reflectores a Sarabia, pero faltaba el nombre, Ortiz aseguró que su abogado y asesores le habían recomendado no hablar. Sin embargo, ella tomó la decisión de romper su silencio por temor.
En seguida, la exconsejera puso el nombre sobre la mesa. “Yo generaba unas alertas mensualmente, donde yo también avisé en ese momento a Laura Sarabia de diez carrotanques más. Entonces, señora juez, yo nunca, jamás y soy incapaz de quitarles un vaso de agua a los niños de La Guajira”, aseguró, advirtiendo que la entonces jefe de gabinete sabía todo lo que ocurría en la UNGRD.
Minutos después, la directora del Dapre emitió un comunicado en su cuenta de X y anunció, por medio de su abogado, una denuncia por los delitos de injuria y calumnia en contra de la exconsejera presidencial. “Es una historia fantasiosa (…) el que las hace se las imagina”, agregó.
Esos señalamientos contra Sarabia se suman a una larga lista de escándalos en los que ha estado vinculada desde el comienzo del Gobierno de Gustavo Petro, aunque algunos vienen incluso de su participación en la campaña presidencial.
La niñera
En enero de 2023, como reveló SEMANA, Marelbys Meza, quien trabajaba en la casa de Laura Sarabia como niñera, fue sometida a una prueba de polígrafo por un grupo de policías en Casa Galán, contigua a la Casa de Nariño, donde la indagaron sobre la perdida de una maleta con dinero.
En este caso, ya han sido condenados varios de los policías implicados, otros incluso han confesado que todo se había dado por orden de otro poderoso alfil del presidente Petro, el coronel Carlos Alberto Feria, quien lo acompaña desde que fue alcalde de Bogotá.
Sarabia ha manifestado que no tuvo conocimiento o responsabilidad en estos hechos. Versión que se aleja de lo manifestado por la misma víctima, Marelbys Meza, quien, sin pelos en la lengua, le dijo a este medio que “fue orden de Laura Sarabia”.
Este robo tiene otro capítulo oscuro: las chuzadas y seguimientos a Marelbys Meza, a quien hicieron pasar por integrante del Clan del Golfo para interceptar sus llamadas. En este caso, también hay confesión. Los policías Dana Canizales y Alfonso Quinchanegua aceptaron el montaje y los seguimientos, pero Quinchanegua acusó al coronel Feria, a quien la justicia no lo ha tocado. En este oscuro caso hay un muerto, el también coronel Óscar Dávila, quien se suicidó, según Medicina Legal.
Mi hermano y yo
A mediados de este año, fotografías publicadas en sus redes sociales levantaron todo tipo de sospechas sobre Andrés Felipe Sarabia, hermano menor de Laura.
En ellas aparecía en jets privados, con ropa de marca, accesorios de lujo y visitando todo tipo de lugares extravagantes. El administrador de empresas, de 25 años de edad, había montado pocos meses antes una firma de consultoría, supuestamente con su hermana a la sombra.
Andrés Felipe fue visto en un palco de honor en un concierto de Karol G en Medellín, junto a Andrés Calle, representante a la Cámara por el Partido Liberal –indagado actualmente por el escándalo de corrupción de la UNGRD– y a Jaime Ramírez Cobo, entonces coordinador de Asuntos Legislativos de la Presidencia y actual asesor del Dapre, la misma entidad que dirige Laura Sarabia.
Cobo también fue salpicado en el escándalo de corrupción de la UNGRD. Los testigos Olmedo López y Sneyder Pinilla han presentado chat con evidencia de lo que sería la participación de Ramírez Cobo en la coordinación de la entrega de los contratos para comprar congresistas.
Mientras respondía por estos lujos y excesos, se conocieron denuncias contra Andrés Felipe que lo señalaban de utilizar sus contactos familiares e influencias para beneficiar a su empresa ALA Consulting, conformada en marzo de 2023, y en la que aparecía como representante legal.El joven ha dicho que es víctima de injurias, calumnias y una campaña de desprestigio.
El Proceso 15.000
En junio de 2024, SEMANA reveló los explosivos audios de las conversaciones de Armando Benedetti con Laura Sarabia. Ella, quien llegó al Gobierno de la mano de Benedetti, uno de los principales promotores de la campaña de Petro, intentaba calmar los ánimos de su interlocutor. Mientras que él daba rienda a todo tipo de señalamientos y acusaciones.
En uno de estos arranques, Benedetti le reclama por la falta de apoyo. “Nadie, nadie, ni Petro, trabajó más que yo en esa (…) campaña. Si no hubiera sido por mí no ganan (…) no ganan nunca. Para que me dé este trato”, reveló un alterado Benedetti.
Pero lo más diciente sería la plata no reportada que llegó a la campaña y entregada por empresarios. Algo que habría conocido Sarabia. “Entonces por favor, por favor, no me vengas a decir que fue por güeva (…) que yo estuve allá, por lo que sea (…), amarrar gente, nadie me deja tirado tres horas ahí, un man que hizo cien reuniones en una campaña política, un man que consiguió 15.000 millones y ahora… que busqué toda la plata y tú lo sabes más que nadie, pa’ que se fuera a los hoteles, para que se viniera para acá y todo lo demás”, se escucha en el revelador audio publicado por SEMANA.
Laura Sarabia fue pieza fundamental de la campaña, acompañó a Petro en las correrías, estaba en las reuniones, conocía a los aliados y financiadores. Además, llegó a la campaña junto con Benedetti, de quien era asesora en su UTL.
Estas irregularidades en la financiación son la base de la imputación formulada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) en contra de Petro y su gerente de campaña, Ricardo Roa, actual presidente de Ecopetrol.