Hasta 30 años de cárcel deben purgar 15 militares responsables de haber asesinado a civiles para presentarlos como guerrilleros muertos en combate. Así lo ordenó el juez penal 19 de Medellín contra un capitán, cuatro suboficiales y seis soldados profesionales por la muerte de los hermanos Arley Vallejo Cardona y Yon García Cardona. Ambos jóvenes trabajaban como vendedores de arepas en Medellín. En mayo de 2006 desaparecieron mientras trabajaban y al siguiente, sus cuerpos fueron encontrados en la morgue como guerrilleros muertos en combate contra el Ejército. Otros cuatro soldados que supieron de lo ocurrido y guardaron silencio, fueron sentenciados a cuatro años de cárcel.