En la madrugada del martes, sobre las 7:10 a. m., Samuel Soto Muñoz, un pequeño de apenas 18 meses de edad, fue trasladado de urgencia en ambulancia junto a sus padres al Hospital de Kennedy.

Según la madre, el niño hizo broncoaspiración luego de ingerir un suero que le habían dado en casa, por lo cual llamaron a la línea 123.

Pero a pesar de los esfuerzos del conductor de la ambulancia y de los paramédicos que atendieron el caso, el menor no pudo aguantar y falleció en el vehículo, minutos antes de su ingreso al centro asistencial.

Según el reporte médico oficial, Samuel “presentaba politraumatismo, trauma craneoencefálico, trauma toracoabdominal cerrado y probablemente ruptura hepática y del bazo. Su muerte se produjo por shock hipovolémico”.

Lo extraño es que la descripción hecha por los mismos especialistas, conocida por el periodista Héctor “El Gato” Gómez, de Olímpica Estéreo, muestra un cuadro muy diferente al descrito por la madre de Samuel, más relacionado al posible maltrato del niño.

“Al llegar, el menor tenía varios golpes en la cara, los glúteos y la región lumbar. Los profesionales de la salud que lo revisaron le descubrieron una fractura en el brazo derecho (húmero), pero no pudieron hacer nada para salvar su vida”.

Una vez se confirmó el fallecimiento y ante las extrañas heridas sufridas por el pequeño occiso, más relacionadas con supuesto maltrato intrafamiliar, el hospital informó de lo sucedido a la Policía de Infancia y Adolescencia, quienes interrogaron a los padres de Samuel.

Si bien lo sucedido durante dicha diligencia forma parte de la reserva de la investigación, se pudo conocer que ambos padres negaron haber violentado al pequeño.

Según el padre, Samuel había sido atacado por un perro días atrás, el cual aparte de morderlo lo habría aplastado con su cuerpo. Estos supuestos hechos habrían tenido lugar en el barrio Class Roma, de la localidad de Kennedy.

Las múltiples versiones de los progenitores hicieron sospechar a los uniformados, que entregaron el caso a la Policía Judicial Sijín, cuerpo que adelantará la investigación oficial y determinará si el menor fue o no víctima de maltrato por parte de algún familiar o alguna otra persona.

El cuerpo del infante ya fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde una autopsia practicada por un médico legista ayudará a dar luces sobre este doloroso caso.

Ambos padres se encuentran en libertad, pero siguen vinculados a la investigación de las autoridades.