Uno de los influencers más reconocidos y polémicos del país es Yeferson Cossio. En sus redes de Instagram, Facebook, TikTok y Telegram tiene más de 20 millones de seguidores y un negocio muy próspero, que, al parecer, va mucho más allá de la monetización por vistas y reproducciones. Ha usado sus canales para promover negocios particulares, algunos fuera de la ley, que ya le han generado sanciones de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC). Ahora, Cossio habría incursionado en el mundo de las apuestas, pero, al parecer, fuera de la norma y fue demandado penalmente.
La denuncia contra el influencer fue interpuesta justamente por la Asociación Colombiana de Operadores de Juegos (Asojuegos) y la Federación Colombiana de Empresarios de Juegos de Suerte y Azar (Fecoljuegos). Lo que se plantea es que Cossio, a través sus redes sociales, promueve juegos de suerte y azar que no están reglamentados ni tienen autorización, por tanto, son ilegales. Además, el dinero que recauda no forma parte del “monopolio rentístico”, lo que ocasiona millonarias pérdidas al sistema de salud, al que deberían llegar los impuestos por esta actividad.
El asunto es simple pero delicado. Según la denuncia, Cossio estaría promoviendo la plataforma de juegos BBRBET y en sus redes sociales explica cómo inscribirse, registrarse, cómo recargar la cuenta y hasta hace sorteos sin autorización legal.
“Yeferson Esteban Cossio Castaño públicamente fomenta e instruye a sus millones de seguidores en la utilización de este operador de apuestas ilegales a través de sus redes sociales, incluso publicitando el link que aparece en sus redes para que por conducto de este ingresen a la plataforma BBRBET y se registren, depositen dinero en su cuenta, jueguen y cobren los supuestos premios; promover esta plataforma que opera de manera ilegal los juegos de suerte y azar y apuestas deportivas se constituye como un delito a la luz del principio de legalidad”, afirma la denuncia penal que tiene en nuevos aprietos al influencer.
Los delitos por los que se acusa a Cossio son enriquecimiento ilícito de particulares, ejercicio ilícito de la actividad monopólica de arbitrio rentístico e instigación a delinquir.
Aparentemente, y así lo señala la denuncia, Cossio estaría incumpliendo el Código Penal, pues BBRBET no tiene autorización legal de Coljuegos para operar. “La plataforma tecnológica-operador de juegos en línea denominada BBRBET no se encuentra autorizada por el Estado colombiano representado por la empresa industrial y comercial del estado administradora del monopolio rentístico de los juegos de suerte y azar, Coljuegos, para realizar esta actividad comercial en el territorio nacional”, se lee en la denuncia.
Y agrega que “solo Coljuegos determina cuáles son los operadores autorizados para comercializar juegos de suerte y azar y juegos novedosos en Colombia, siendo así que en su página oficial se encuentra un listado de los operadores legales, así como la información contractual de las empresas Wplay.co, Betplay, Colbet, Zamba, Codere apuestas, Mozzart bet, Luckia, Sportium, Rushbet.co y Fullreto, como las únicas autorizadas para comercializar juegos novedosos operados por internet”.
No es la primera vez que el influencer es investigado por el uso de sus redes para promover negocios e inversiones. En el pasado lo hizo con la criptomoneda Daily Cop, que terminó en una gigantesca estafa. Y acaba de ser sancionado por la SIC por comerciar lo que denominó el “método Cossio”, con el que supuestamente daba pautas para enriquecerse como él lo ha hecho. Ahora el lío es con estas apuestas.
Sin embargo, Cossio, al parecer, se ha cuidado de hacerle el quiebre a la norma en este caso, pues no se refiere a estas como rifas o apuestas, sino que emplea el término “dinámicas”. No obstante, en la práctica y por su funcionamiento, se estaría tratando de juegos de suerte y azar. Con un agravante, se estarían vinculando menores de edad sin ningún tipo de restricción.
“En la evidente rifa realizada por Yeferson, este transgrede la ley y genera un riesgo enorme por cuanto no tiene reparo en la participación en estas actividades de menores de edad, aconsejando en el video que si un ganador es menor de edad, solo pida una cuenta bancaria de un adulto o haga las gestiones para obtener una cuenta en donde poder transferir el monto del premio”, señala la denuncia.
El asunto será difícil de explicar en los tribunales, pues el mismo Cossio en sus redes afirma que por su mediación se han registrado en la plataforma de apuestas BBRBET miles de suscriptores. Por esta actuación ingresó a su patrimonio la suma de 145 millones de pesos, que serían fruto de la utilización de modalidades de juego no permitidas por la ley, lo que podría incluso configurar el delito de enriquecimiento ilícito.
Este es el nuevo lío de Yeferson Cossio, uno de los más reconocidos influencers, quien llama la atención de sus seguidores con actos irreverentes como ponerse prótesis en el pecho, al igual que las mujeres, para luego retirarlas. Hasta se realizó la que denominó como “la cirugía más dolorosa” al cortar sus pantorrillas e insertar un clavo de elongación para crecer unos centímetros.
Su cuenta le ha generado una auténtica fortuna, como sucede con muchos influencers, ha promovido exitosos negocios propios, pero en varias ocasiones actuando al borde de la línea de la ilegalidad.
Un ejemplo es la sanción que le impuso la SIC el pasado 26 de abril, pues promovió, “mediante publicidad engañosa”, “el método Cossio”, que prometía ganancias millonarias en un corto plazo. Así lo impulsaba en sus redes: “¿Qué van a pensar ustedes ya en cinco meses? Cuando todos los que sí compraron el curso estén tapados en seguidores, en plata, y, o sea, 49 dólares puede ser mucho, obviamente, para unas personas, pero eso, eso lo pueden librar literalmente con su primer video”.
A juicio de la SIC, el Grupo Cossio, como está registrada la marca del influencer, “vulneró las expectativas creadas en aproximadamente 23.300 personas que adquirieron el ‘método Cossio’, valiéndose de la conexión emocional de estas con el señor Yeferson Cossio, reforzando la idea que tienen quienes lo siguen en las redes de obtener los mismos resultados de éxito del influenciador, al imitar su comportamiento, adoptar sus hábitos o adquirir un producto que este anuncie”.
SEMANA se comunicó con el Grupo Cossio para conocer las explicaciones ante este nuevo señalamiento. Sin embargo, solo manifestaron que esa era el área administrativa de la empresa y que era necesario enviar una solicitud por escrito a la señora Luisa a su correo electrónico para gestionar una respuesta. La comunicación se envió, pero no hubo réplica.