Una red dedicada a la fabricación y distribución de licor adulterado fue desarticulada por las autoridades, tras la realización de varios allanamientos simultáneos en las ciudades de Manizales, Medellín y Bucaramanga.

De acuerdo con lo manifestado por el fiscal general de la Nación, Francisco Roberto Barbosa Delgado, la organización criminal estaría conformada por 18 personas, de las cuales 4 son integrantes activos de la Policía Nacional.

En la ciudad de Manizales se adelantaron registros en varios establecimientos comerciales dedicados a la venta de licor, en los cuales fue posible la incautación de miles de botellas con bebidas embriagantes falsificadas, varias motocicletas y vehículos.

El Fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa, confirmó los resultados de los operativos | Foto: Semana

Al parecer está estructura tenía personas encargadas del negocio ilícito en todos los frentes; como la compraventa de las materias primas para procesar el licor, la adquisición de los envases, el almacenamiento y la distribución.

Algunos de los delitos a los que se enfrentan estas personas son corrupción de alimentos o productos médicos; imitación o simulación de alimentos, productos o sustancias; concierto para delinquir y prevaricato por omisión; este último en el caso de los policías capturados.

Una de las primeras pistas sobre el accionar del grupo habría sido la detención de dos hombres conocidos como Germán y Ramón, de 50 y 63 años, quienes a inicios de septiembre fueron sorprendidos con 200 botellas de aguardiente adulterado valoradas en $1.500.000, cuando se movilizaban en un carro particular por la carrera 23 con calle 19 de Manizales.

Otro hecho registrado en esas mismas fechas y que había puesto en alerta a las autoridades en la capital caldense, fue el decomiso de 55 cajas con 1.250 botellas de licor falsificado durante un operativo de la Policía de Tránsito y Transportes.

El cargamento valorado en $50 millones fue interceptado en el kilómetro 10 de la vía Tres Puertas - La Estrella, en el área rural de Manizales, cuando se adelantó la revisión del camión en el cual era transportado.

Las botellas incautadas eran transportadas en dos vehículos | Foto: Semana

Por este hecho se produjo la captura de dos hombres identificados como Víctor y Juan, oriundos de Pereira y Santander de Quilichao en el departamento del Cauca, quienes no presentaron a las autoridades la respectiva guía de movilización.

Cuando una persona ingiere licor adulterado, aunque sea en cantidades muy pequeñas, puede experimentar graves problemas en su salud como convulsiones, daños en el hígado, ceguera irreversible, alteraciones neurológicas, afectaciones en los riñones e incluso la muerte.

Al momento de adquirir bebidas embriagantes es importante acudir a lugares reconocidos y desconfiar de los precios cuando sean demasiado bajos. También es fundamental comprobar el estado de las tapas de los envases, ya que no deben estar golpeadas, raspadas ni abolladas.

Otra manera de comprobar si el licor presenta irregularidades es observando el líquido a contraluz, ya que no debe mostrar ninguna clase de partículas extrañas ni en suspensión.

La etiqueta también puede ser un buen indicador acerca de la autenticidad del producto, porque en esta debe aparecer información clara del mismo como la ubicación del envasador, fabricante o importador autorizado.

En esta se deben especificar igualmente el número de registro sanitario, el contenido neto de acuerdo al Sistema Internacional de Medidas, número de lote o código de producción; y la aclaración si se trata de una producción nacional o extranjera.

La Policía recordó que el consumo de licor adulterado puede causar la muerte. | Foto: Policía

Una cantidad mínima de licor adulterado puede provocar que la persona vea destellos alrededor de los objetos y personas, vómito, dolor abdominal, dificultad para respirar, dolor de cabeza fuerte, bradicardia, convulsiones y pupilas dilatadas.

Para el proceso de fabricación de licor adulterado, los grupos delincuenciales emplean sustancias que resultan sumamente peligrosas o potencialmente mortales cuando son consumidas por las personas, aunque sea en mínimas cantidades.

Una de ellas es el metanol, que se utiliza como disolvente industrial, anticongelante; solvente de tintas, adhesivos y biocombustibles, o como materia prima para la producción de formaldehído, entre otros.