Aunque pasaron dos meses de la emergencia en el municipio de Supía, en el departamento de Caldas, e incluso su alcalde tuvo que ir hasta Bogotá para clamar por ayudas, finalmente, el Gobierno nacional dio respuesta a las necesidades de esta población para atender la tragedia ocurrida por la inundación del pasado 3 de septiembre en la noche que dejó una persona fallecida, siete heridas, más de 3.000 familias damnificadas, 16 veredas y barrios incomunicados, 48 casas destruidas en su totalidad, 84 averiadas y otras 934 con daños menores.
En la población estuvo el subdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Óscar Bernardo Goyeneche Durán, quien manifestó que gracias a la expedición del Decreto 2113 que se refiere a la Declaratoria de Desastre Nacional, se facilitan todas las gestiones para que se pueda responder a las reclamaciones que se han venido planteando en varias regiones del país por las afectaciones que está dejando las lluvias.
“Hemos estado en un proceso de organización interna de gestión en el Gobierno nacional para determinar la asignación de recursos, de tal manera que podamos brindar atención integral a la población que la requiere. Vamos a contribuir en el tema de las ayudas humanitarias y los subsidios de arrendamiento para las familias damnificadas o las que deban ser reubicadas temporalmente por estar en zonas de alto riesgo”, puntualizó.
Igualmente, anunció que el compromiso desde el Gobierno es el de seguir apoyando al municipio de Supía para que haya continuidad en la presencia de la maquinaria amarilla que trabaja en la readecuación de las carreteras rurales y toda la malla vial terciaria que terminó afectada; así como la recuperación de la infraestructura que resultó averiada como las bocatomas o los puentes, para los que pidió unos meses de plazo para poderlos reparar.
Dijo, además, que es necesario pensar en un proceso de recuperación integral del río Supía debido a que está habitado en algunas zonas que son de protección, por lo que es indispensable el tratamiento del cauce con acciones coordinadas de naturalización que deben contar con una participación activa de la propia comunidad.
“Nuestra atención también está pensada en la recuperación de toda la producción agropecuaria porque somos conscientes de que se vio muy perjudicada con lo que sucedió el pasado 3 de septiembre durante las inundaciones, y por eso sabemos que es necesario adoptar planes integrales de ayuda para las personas afectadas”, indicó.
En este encuentro también estuvo el jefe de la Unidad de Gestión del Riesgo de Caldas, Félix Ricardo Giraldo Delgado, quien manifestó que se hizo un planteamiento detallado de todas las necesidades operativas y de análisis técnico que son requeridas para darle un manejo adecuado al río Supía, mediante la realización de obras de mitigación de emergencias como la reconformación de su cauce y la protección de las márgenes y las quebradas.
“Vamos a estudiar un proyecto para la construcción de jarillones en el río Supía, el cual fue presentado por Corpocaldas y comprende la generación de una zona de protección y otra de amortiguación de cauces para poder proteger eficazmente el área urbana del municipio”, explicó.
Destacó la entrega del Gobierno Nacional de un importante lote de ayudas humanitarias que comprende cerca de 300 kits alimentarios, de noche y de cocina, los cuales serán distribuidos entre las familias que resultaron damnificadas y que están inscritas en los censos que fueron elaborados por los diferentes organismos de emergencia.
Por su parte, el alcalde de Supía, Marco Antonio Londoño Zuluaga, agradeció la realización de este Comité Municipal de Gestión del Riesgo para resolver la situación del municipio y dijo que se necesita trabajar en un plan de reubicación temporal y definitivo para las familias afectadas, el cual ya se está evaluando con la Secretaría de Vivienda de Caldas y la Alcaldía. Explicó que este comprende la ubicación de unos predios en la población y la formulación de un proyecto que será desarrollado con recursos del Fondo Adaptación que maneja el Ministerio de Hacienda y Crédito Público.
“Nuestra Oficina Ambiental llevará a cabo un diagnóstico preciso de la producción agropecuaria que resultó afectada por las inundaciones, para que también haga parte de los programas de beneficio que plantea el Gobierno”, anunció.
Así mismo, indicó que se planea la creación de un Fondo de Inversión Colectiva (FIC) para solucionar parcialmente esta problemática, que también servirá para darle una correcta destinación a los escombros que todavía están acumulados en la plaza de toros de la localidad, pues son cerca de 2.500 metros cúbicos de material que dejó el desbordamiento generado por la lluvia y que deben ser llevados a un relleno sanitario porque se están convirtiendo en un foco de infecciones para sus habitantes.
Pero el alcalde Marco Antonio Londoño no se dedica solamente a esperar las soluciones desde los estamentos nacionales, sino que él mismo las busca, pues ya tiene prevista la realización para el 17 de noviembre de una mesa técnica con la Gobernación de Caldas y los ingenieros consultores que adelantan actualmente un estudio, para determinar cuáles son las obras de mitigación del riesgo que deben ser construidas en el río Supía y la quebrada Rapao.
También anunció que se está buscando la creación de un sistema de alertas tempranas que ya se cotizó con el Instituto de Estudios Ambientales (IDEA), de la Universidad Nacional de Colombia, gracias a los análisis que adelanta su docente Jeannette del Carmen Zambrano Nájera.