A un centro carcelario fueron enviados dos exmilitares que están siendo investigados por la Fiscalía General de la Nación por su presunta participación en el hurto de $ 45 millones de una finca.
Los hechos ocurrieron el 20 de enero de 2023 en zona rural del municipio de Coyaima, que pertenece al departamento del Tolima.
De acuerdo con las autoridades, para ese entonces sargentos viceprimeros asignados a un comando de Medellín en Antioquia, habrían utilizado bajo engaño a integrantes del Gaula Militar del Tolima para llevar a cabo el hurto en la finca de un ciudadano. Este último denunció no solo la pérdida de la fuerte suma, sino también el maltrato del que fue víctima por parte de un falso servidor del CTI, al igual que su compañera.
La denuncia afirma que la casa del ciudadano fue registrada en su totalidad por los dos ciudadanos que están siendo imputados y por otros falsos funcionarios.
“Afuera, formando un cordón de seguridad, como se hace en este tipo de diligencias, se habrían quedado los militares que creían estaban en una diligencia dentro de los términos de ley”, indica la Fiscalía.
Según el informe oficial revelado por la Fiscalía “luego de encontrar lo que buscaban, los hoy privados de la libertad se llevaron el dinero en bolsas negras”.
Las investigaciones revelan que al parecer estas dos personas que se encuentran detenidos en un batallón de Facatativá, en Cundinamarca, por cuenta de la justicia penal militar, fueron imputados por los delitos de hurto calificado y agravado en concurso con tráfico, fabricación y porte de armas de fuego.
Los exfuncionarios aceptaron la comisión del hurto, pero no el delito de porte ilegal. En el proceso se está a la espera de que los exmilitares sean puestos en libertad por cuenta de la Justicia Penal Militar, para ser trasladados a la Cárcel Coiba Picaleña de Ibagué.
Alarmante denuncia: en el cementerio de Lérida, Tolima, sacaban restos humanos para revender los lotes
Una preocupante situación dio a conocer el alcalde del municipio de Lérida, ubicado en el departamento del Tolima, al denunciar que en el cementerio de esta población, sacaban los restos de personas fallecidas para revender los lotes.
Esta práctica ilegal fue denunciada por el mandatario local Marco Antonio Ospina Velandia, quien reveló que la antigua administración del campo santo, al parecer, permitía que unos sujetos entraran y saquearan los cadáveres para luego negociar por el lugar.
“Había unos personajes que dejó la administración anterior, quienes vendían los lotes sin ninguna escritura, solo con recibos de 300, 400 y 500.000 pesos”, informó el alcalde de Lérida.
Así mismo, el mandatario recalcó que, frente a este panorama, inició un proceso para recuperar aquellos terrenos que fueron vendidos para poder así devolver las partes. “Nos hemos visto obligados a iniciar un proceso para sacarlos de ahí y comenzar a trabajar de la mejor manera. Había una señora que aparentemente tiene el dominio del lugar desde hace más de 30 años, y otro personaje que había estafado a muchas personas vendiendo lotes”, señaló Ospina Velandia.
La ‘Mafia con el dolor ajeno’, así fue catalogada esta indignante acción que fue rechazada categóricamente por el sector católico de Lérida, tras profanar tumbas ajenas. “Sacaban los restos y los dejaban en lugares dispersos para poder obtener los terrenos y comercializarlos”, puntualizó el alcalde.
Además de esta situación, el mandatario también denunció que, al parecer, esas mismas personas inescrupulosas, estarían ofreciendo a la comunidad en general planes de vivienda que no cuentan con los permisos requeridos. Asimismo, tendrían conocimiento que de esos sujetos estarían realizando deforestación en la parte alta del municipio.