Más de 50 años de prisión deberá pagar el confeso asesino de la niña Danna Sofía Alzate Galvis, quien fue raptada de su casa el 21 de noviembre de 2022 en el municipio de Chinchiná, en la zona centro-sur de Caldas.

Se trata de Juan Carlos Yepes Bañol, conocido con el alias de El Cojo, quien fue condenado a 54 años de cárcel por un juez por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años y feminicidio agravado.

La estampida ocurrió en el cementerio central de Chinchiná, Caldas. | Foto: Tomada de Facebook

Este sujeto reconoció durante el juicio que había estado rondando las calles del barrio Nuevo Horizonte de Chinchiná durante el día del crimen, pero que fue en la noche cuando aprovechó para llamar a la niña de apenas seis años y engañarla para hacerla salir de su casa.

La familia de la menor se encontraba departiendo y consumiendo licor con la puerta de la vivienda abierta, por lo que no se percataron de su salida ni tampoco de la presencia de Yepes Bañol en las inmediaciones.

Posteriormente, alias El Cojo arrastró y se llevó a Danna Sofía hacia un sector conocido como La Curva de Cenicafé o Los Cuervos, ubicado en la orilla del río Chinchiná, donde la accedió carnalmente y la asfixió hasta provocarle la muerte.

Tras conocerse la captura de este hombre, la ciudadanía chinchinense acudió en masa a las instalaciones de la Estación de Policía, donde los uniformados debieron emplearse a fondo para que El Cojo no fuera arrebatado de sus manos y linchado por la comunidad.

La búsqueda de la menor se centró inicialmente en el área cercana a su casa, ya que el homicida manifestó que la había dejado sin hacerle ningún tipo de daño, aunque no se encontró ningún rastro que corroborara su versión.

El hombre aceptó que raptó, violó y asesinó a la menor. | Foto: Cortesía Policía Caldas

Sin embargo, con el paso de las horas fueron localizadas en las inmediaciones del río Chinchiná algunas prendas de vestir, como una sandalia y la chaqueta que llevaba la niña cuando desapareció.

Los investigadores decidieron llevar hasta el sitio al asesino, quien al final confesó que había ocultado el cuerpo de la menor con unas ramas a pocos metros de donde fueron halladas sus pertenencias.

La rabia y la frustración aumentaban con el paso de las horas, sobre todo cuando se supo que Yepes Bañol debería estar preso por dos delitos similares, pero se había escapado de la Estación de Policía del municipio de La Virginia, Risaralda.

Resulta que este sujeto estaba detenido por la violación de una niña de 11 años, a quien mediante engaños sacó de su vivienda el 19 de agosto de 2021 para después abusar sexualmente de ella, en hechos que se registraron en el barrio San Isidro de la vereda El Palo, perteneciente al municipio de Anserma al occidente de Caldas.

Como si esto fuera poco, alias El Cojo había asesinado a Karol Julieth Ramírez Moreno, una mujer de 24 años oriunda de Cali, a quien estranguló y enterró en un paraje solitario de una finca localizada en la vereda La Carmelita, en Quimbaya, Quindío, el 31 de diciembre de 2021.

El delincuente recibió $200.000 pesos de Luz Sorani Marcelo Roldán, quien era la pareja sentimental de la víctima y al parecer planeó su muerte por celos, a pesar de que la mujer viajó desde Cali a territorio quindiano para pasar junto a ella las festividades de fin de año.

Un hombre de 65 años confesó que la raptó, violó y asesinó. | Foto: Cortesía Bomberos Voluntarios de Chinchiná, Caldas

Este crimen debía tener a Yepes Bañol tras las rejas durante más de 15 años, pero se fugó de manera inexplicable de las instalaciones policiales de La Virginia y se fue a Chinchiná para trabajar en la cosecha cafetera, donde logró ser contratado en una finca, ya que ni siquiera le pidieron la cédula para empezar las labores de recolección.

De acuerdo con Armando Castrillón Grajales, director seccional de la Fiscalía General de la Nación en Caldas, alias El Cojo pagará los 54 años de prisión por los delitos de feminicidio, acceso carnal violento y secuestro, todos agravados.

La ciudadanía espera que alias El Cojo esta vez pague cárcel por sus crímenes, ya que este peligroso individuo natural de Belalcázar en el departamento de Caldas siempre termina libre en las calles para seguir cometiendo sus fechorías.