La alerta naranja que se emitió a raíz de los movimientos sísmicos que se están presentando en el volcán Nevado del Ruiz hizo que las autoridades anunciaran nuevas medidas para prevenir las afectaciones que causaría una posible erupción.
Así lo señaló en su más reciente rueda de prensa el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Luis Fernando Velasco, quien también advirtió que hay dos tipos de riesgo a los que podrían enfrentarse los municipios que se encuentran en la zona de influencia del volcán.
Por un lado, se ha conocido que están los municipios expuestos a “flujos piroclásticos”, que incluyen gases, cenizas y materiales sólidos del volcán que tienen el potencial de provocar “tragedias”, según explicó Velasco. En otras palabras, las personas que se encuentran en estas zonas son las más vulnerables a una posible erupción, que podría amenazar su vida.
Y, de otro lado, existe el riesgo de que otros municipios más alejados presenten avalanchas a raíz de las grandes cantidades de lodo que podrían desprenderse en las zonas circundantes.
“Si la erupción fuese más grande, las principales problemáticas serían la caída de ceniza y la formación de lahares o flujos de lodo que afectarían los ríos que nacen en el volcán. Como la mayoría de estos desembocan sobre el río Magdalena, habría muchos municipios afectados, aunque también algunos flujos de lodo podrían alcanzar tributarios del río Cauca, como el río Chinchiná”, señaló en una nota explicativa el Servicio Geológico Colombiano.
Velasco, mientras tanto, sostuvo que los sismos que se habían empezado a registrar en los últimos días se siguen manteniendo y no eran tan fuertes y numerosos desde 1985, cuando ocurrió la triste tragedia de Armero que se llevó la vida de entre 23.000 y 25.000 personas.
“Por ello, hemos tomado una primera decisión y es solicitarles firmemente a los consejos locales de gestión del riesgo a agilizar las evacuaciones preventivas que ya se han ordenado. Estamos hablando de 2.000 o 2.500 familias que tenemos mapeadas que están en las zonas de más alto riesgo”, sostuvo el director de la UNGRD.
Explicó que estas personas son las más vulnerables a los impactos de proyectiles producidos por el volcán, que son potencialmente mortales.
En esa medida, Velasco aseguró que los consejos locales cuentan con protocolos destinados a garantizar la seguridad de las personas evacuadas, que podrán resguardarse en municipios cercanos y, en la medida de lo posible, junto a conocidos y familiares.
Preocupación por los animales
Velasco advirtió que una de las preocupaciones de las autoridades tiene que ver con el bienestar de los animales de los habitantes de las zonas aledañas al volcán. Esto se debe a que en muchos casos estos representan el sustento para las familias, por lo cual algunas han tenido dificultades para evacuar o incluso se han negado a hacerlo.
“¿Qué estamos trabajando con gobernaciones, que fue idea de ellos y nosotros respaldamos? O buscar unas fincas lejos de las zonas de riesgo para trasladar a algunos de estos animales (...) o buscar una especie de subsidio para que la gente les pueda estar llevando alimentos a sus animales”, señaló Velasco.
Advirtió que les están pidiendo a las personas que, al menos durante las noches, vayan hacia los puntos habilitados para la evacuación y, de ser necesario, que durante el día puedan ir a ver sus fincas con la ayuda de las autoridades.
El funcionario también que el Bienestar Familiar está trabajando con especial énfasis en la seguridad de los niños y niñas que habitan en la región.
“La tarea entre ayer y hoy fue decirles que hay que evacuar. Estamos preparando los albergues, estamos preparando los sitios adonde pueden llegar. Tenemos las condiciones. De hecho, quiero señalar que en algunos corregimientos y en algunas veredas algunas familias ya han tomado la decisión de evacuar y han evacuado preventivamente“, puntualizó Velasco.