La actividad sísmica asociada a fracturamiento de roca al interior del volcán Nevado del Ruiz aumentó en cuanto a número de sismos, en comparación con el 5, 6 y lo que va corrido del 7 de mayo, según el más reciente informe emitido desde el Servicio Geológico Colombiano.
Esta sismicidad estuvo localizada principalmente en el cráter Arenas y en los sectores nororiental, oriental y suroriental del volcán, a una distancia máxima de 2 km a partir de este, y con profundidades entre 2 y 6 km.
Algunos de estos sismos se relacionaron con la actividad del domo (protuberancia o montículo) de lava ubicado en el fondo del cráter.
“La actividad del volcán Nevado del Ruiz el día de ayer 6 de mayo y lo que va del día de hoy 7 continúa en niveles similares a los días anteriores. Es decir, la sismicidad en general de fractura sigue en niveles bajos, algunos sismos se localizan alrededor del cráter en el cráter mismo, pero digamos de baja energía. Lo que persiste es la actividad relacionada con los fluidos, la actividad de tanto de salida de gases como de ceniza”, dijo John Makario Londoño, director técnico de geoamenazas del Servicio Geológico Colombiano.
La máxima magnitud registrada fue de 1,6, como se reportó el día 6 de mayo, correspondiente a un sismo ocurrido a las 03:09 a. m., a 2 km al suroriente del volcán, y a 3 km de profundidad, aproximadamente.
En cuanto a la actividad sísmica relacionada con el movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos, hoy presentó un comportamiento similar en número de sismos y en energía sísmica liberada con respecto al día anterior (5 de mayo).
“También continúan las anomalías térmicas en el fondo del cráter, como han podido ver esta sismicidad, y este comportamiento en general ha permanecido por varias semanas de una manera muy similar. Esto no quiere decir que el volcán ya retornó a sus niveles normales, por el contrario, esta sismicidad sigue siendo muy alta”, anotó Londoño.
Algunas de las señales sísmicas estuvieron asociadas a emisiones pulsátiles de ceniza confirmadas a través de las cámaras web utilizadas para el monitoreo volcánico. La altura máxima de la columna de gases y/o ceniza observada fue de 800 m medidos desde la cima del volcán. También se recibió reporte de avistamiento de varias emisiones de ceniza desde Murillo (Tolima) y de leve caída de ceniza en el municipio de Manizales (Caldas).
Continúan las variaciones de la desgasificación de dióxido de azufre a la atmósfera, con niveles similares a los observados en los últimos días y la salida de vapor de agua desde el cráter a la atmósfera.
“Es importante recordar que uno no se puede acostumbrar a lo que no está normal, el volcán no está normal, o sea, el volcán tiene un nivel de actividad demasiado alto, pero que con los días se va acostumbrando uno a que, aunque salga ceniza, eso se va a volver normal”, aseveró el director técnico de geoamenazas.
Es posible que los niveles de actividad sísmica, así como los niveles de desgasificación o salida de ceniza, disminuyan o sean oscilatorios, en el sentido de aumentar unos días y disminuir otros. Por ello, la actividad del volcán Nevado del Ruiz continúa en nivel naranja.
“Este nivel de naranja persistirá todavía porque el volcán no ha retornado a los niveles que tenía hace unos meses; segundo, no podemos cambiar a rojo tampoco porque la erupción uno no sabe si va a ocurrir o no realmente, y tercero, es importante recordar que a veces el volcán ha mostrado que cuando se calma mucho después de haber tenido una actividad sísmica y otro tipo mucho más alta, es cuando ha hecho erupciones”, enfatizó.
Durante este tiempo, en caso de que se produzca una aceleración de los procesos que sugieran una erupción inminente o que se produzca la erupción en sí, el nivel de actividad se cambiará a rojo.
Por ello, las autoridades le piden a la comunidad conservar la calma y seguir todas las instrucciones.
“Es importante estar muy pendientes, no quiere decir entonces que en este momento va a tener que hacer una erupción, sino que estas condiciones a veces hacen que las autoridades y la comunidad general se acostumbren a ciertos niveles de actividad que, vuelvo y repito, no son normales. Hay que estar muy atentos a la información oficial del Servicio Geológico Colombiano y la Unidad Nacional de este riesgo, y de la misma manera con las autoridades locales y departamentales de Gestión de Riesgo”, anotó.