La Alcaldía de Medellín citó a una junta directiva extraordinaria del Metro para cambiar al gerente a pocas semanas de que Federico Gutiérrez tome posesión del cargo. Es decir, la administración de Daniel Quintero le dejaría como herencia al nuevo mandatario un ‘jefe’ para coordinar el sistema masivo de transporte.

La reunión se llevará a cabo el próximo 7 de diciembre y el distrito contaría con todas las mayorías para ejecutar su plan: sus representantes darían visto y también los delegados del Gobierno nacional. Sin embargo, la piedra en el zapato serían los voceros de la Gobernación de Antioquia que se oponen a la ‘jugadita’.

La pelota la tiene el presidente Gustavo Petro, quien ha recibido varios mensajes en las últimas horas para no respalde las pretensiones de la Alcaldía. El mensaje que más ha llamado la atención es el de Federico Gutiérrez, quien lo instó a no cometer errores y a no cobrarle al departamento las diferencias ideológicas.

“Presidente, le pido en nombre de la gente de Medellín y de Antioquia que no cometa ese grave error. Es cierto que usted, sumado a la Alcaldía actual, tienen mayorías para imponer un gerente del Metro. Esta es una entidad de todos. Es una entidad que se debe manejar desde el punto de visto técnico”, dijo Fico.

También reclamó que esta transición se dé a un mes de tomar las riendas del distrito y, si se da, lo consideraría como un golpe de Estado en el sistema masivo de transporte: “Lo invito al diálogo. Sé que no ha sido posible que hablemos. Por favor, no le cobre a Antioquia nuestras diferencias ideológicas”.

El expresidente Álvaro Uribe se sumó a los mensajes de preocupación y calificó como un abuso las maniobras del alcalde encargado de la ciudad, Óscar Hurtado, de citar a una junta extraordinaria para remover al gerente: “Los ciudadanos han hecho del Metro un referente de civismo que la politiquería quiere destruir”.

Metro de Medellín. Imagen de referencia. | Foto: Diego Andrés Zuluaga

El gobernador Aníbal Gaviria, quien tiene serias diferencias con el Gobierno nacional, manifestó que el propósito de la administración distrital sería “alimentar revanchismos a costa de la tradición del manejo técnico y transparente de El Metro”, pero advirtió que defenderá esta entidad que es orgullo de Colombia.

Sobre la mesa hay temas sensibles que deberá maniobrar el gerente: la construcción de la línea tres del Metro que pasaría por la 80, la edificación de cinco metrocables que apalancaría la misma Presidencia y el diseño de la cuarta línea del Metro que, según los planes, tendría algunos tramos subterráneos.

Con todo esto, el único que podrá estabilizar la polémica es el primer mandatario: sus representantes en la junta directiva cambiarían cualquier decisión, sea tumbar a Tomás Elejalde del cargo o dar la sorpresa con un nuevo funcionario, cuyo nombre se desconoce y se destapará el día de la junta extraordinaria.

Federico Gutiérrez y el presidente Gustavo Petro. | Foto: SEMANA

Más allá de la escandalosa transición, este es el primer cara a cara del Gobierno nacional con Federico Gutiérrez como alcalde electo de Medellín, y anticipará la relación que habrá entre La Alpujarra y la Casa de Nariño en los próximos cuatro años, cuyas diferencias políticas e ideológicas los tienen alejados.

De momento, la Alcaldía no se ha pronunciado oficialmente sobre el sorpresivo cambio que pondrá sobre la mesa el próximo 7 de diciembre.