SEMANA conoció que la Alcaldía de Medellín y la Fiscalía General de la Nación encendieron las alarmas por los escenarios de violencia que podría desencadenar el asesinato de Edison Rodolfo Rojas, hasta este jueves considerado como uno de los principales cabecillas del grupo delincuencial organizado La Terraza.
Su muerte se dio este 7 de marzo, cuando se encontraban dialogando en un parqueadero del barrio El Poblado. Fue atacado a disparos por sicarios y, en medio de la confrontación, uno de sus escoltas también perdió la vida. De inmediato, una unidad del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) asumió el estudio del caso.
Fuentes del ente de acusación le confirmaron a este medio que hay tres hipótesis que podrían explicar el crimen: una disputa interna de la banda que comandó, un ajuste de cuentas entre grupos ilegales o las ampollas que han levantado los acercamientos de paz con el Gobierno Petro al interior de la cárcel La Paz de Itagüí.
Los mismos investigadores, de manera extraoficial, narraron en SEMANA que no se trata de un homicidio cualquiera. El jueves murió uno de los líderes visibles del crimen en la ciudad, a quien se le concedió la libertad condicional en 2020, en medio de la condena de 16 años por homicidio, concierto para delinquir y porte de armas.
Esto podría desatar una ola de violencia en el Valle de Aburrá por lo que representaba el señor Edison Rodolfo Rojas y que, en una posible confrontación entre los bandos, movería la línea de mando de su grupo. Con todo, la Policía Metropolitana comentó que las condiciones de seguridad están dadas para frenar cualquier amenaza.
La otra víctima de este doble asesinato es Julián Alexander Suárez, quien tendría entre 30 y 35 años, y cumplía las funciones de seguridad del capo. Ellos dos estaban conversando con una tercera persona, cuya identidad se desconoce, y resultó herida en medio del tiroteo. Así lo detalló la Secretaría de Seguridad de la ciudad:
“Las víctimas se encontraban dialogando en un parqueadero de la zona cuando fueron abordadas por un sujeto, quien los lesiona y emprende la huida. En el hecho resultó herido un tercer hombre, quien se encontraba con las víctimas. Móviles y sindicados del hecho son materia de investigación”, aclaró la entidad.
Así las cosas, en lo que va corrido de 2024, 58 personas han muerto de manera violenta en la capital de Antioquia. Frente a las estadísticas de 2023, hay una disminución cercana al 17 por ciento. Todo esto está relacionado con actos de intolerancia, hurtos, grupos ilegales, violencia intrafamiliar y violencia de género.
Desde que se conoció del crimen de alias Pichi Gordo, no han parado las reacciones en las redes sociales. La voz que ha tenido mayor despliegue ha sido la del exsecretario de Seguridad de Medellín, Andrés Tobón, quien combatió durante la segunda administración de Federico Gutiérrez a las estructuras criminales.
“Al parecer, habrían asesinado a Pichi Gordo, cabecilla histórico de La Terraza, en medio de un ataque sicarial en El Poblado. En caso de tratarse de un ajuste de cuentas, una orden de este nivel sería imposible sin la autorización de alias Douglas”, comentó el también concejal distrital en sus redes sociales.