Nicolás Villegas Ciro, un minero de 40 años, en el corregimiento La Danta en Sonsón, que duro desaparecido por al menos 24 horas, fue encontrado por habitantes que ayudaban en las labores de búsqueda.
El minero, según algunos medios vivía en el barrio La Esperanza, de allí salió el pasado domingo 13 de agosto para su trabajo y no volvió.
De acuerdo con El Tiempo, el reporte entregado al comandante de Distrito, el cuerpo de Villegas fue encontrado por los habitantes que se encontraban buscando al minero en los alrededores, específicamente en un sector llamado Iglesias, allí hallaron sus útiles de trabajo y rastros de sangre.
“Las personas que se encontraban en el lugar informan que observan tierra removida, por lo cual empiezan a cavar hallando el cuerpo sin vida de dicho ciudadano con desprendimiento del brazo derecho y cabeza”, dice el medio sobre el reporte oficial.
De acuerdo con el mismo, el cadáver de Villegas fue trasladado al cementerio de La Danta donde la Sijín, realizó la inspección técnica del cadáver.
En el municipio antioqueño actúan grupos ilegales como el Clan de Oriente y reductos paramilitares ligadas con el clan Isaza. La Danta fue sede en el pasado de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio, comandadas por Ramón Isaza y su familia, que se desmovilizaron en el año 2006.
Otros hechos similares
Las autoridades del Valle de Aburrá, en Antioquia, hallaron un nuevo cuerpo embolsado, esta vez en el barrio La Gabriela del municipio de Bello.
El cuerpo, el cual estaba envuelto en bolsas y vinipel, fue encontrado dentro de un costal, a un lado de la vía que conduce a Copacabana.
Se sabe que el cuerpo encontrado pertenecía a un hombre, no obstante, su identidad no ha sido determinada por las autoridades.
“Tenemos unas hipótesis, pero estamos confirmando y realizando actividades. Algo que resaltar es que los grupos realizan estas acciones para quitarle la vista a los lugares donde posiblemente se están presentando estos hechos”, aseguró del comandante operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, José Miranda.
Con este, según las autoridades, ya son 17 cadáveres encontrados bajo esta misma modalidad en lo que va corrido del año en el Valle de Aburrá.
Siguiendo el más reciente informe de la Fiscalía General de la Nación, 16 de los cuerpos correspondían a hombres y solo uno, a una mujer. A estos hechos, se le suma el hallazgo de una extremidad, al interior de la planta de aguas residuales del municipio de Itagüí, ubicado al sur del Valle de Aburrá.
El último cuerpo embolsado fue encontrado esta misma semana en el municipio de Bello, puntualmente el martes 11 de julio. La víctima presentaba varias heridas en diferentes partes del cuerpo, según las autoridades.
Varios análisis forenses permitieron a las autoridades establecer que la víctima era Deiby Alberto Blandón Marín, un hombre de 41 años quien fue visto por última vez con vida el pasado miércoles, 5 de julio, cuando se encontraba en su taller de motos, ubicado en La Balladera, en Medellín.
Desde aquel miércoles, cuando Deiby Alberto desapareció de forma misteriosa, su familia lo había reportado como desaparecido. A través de redes sociales publicaron fotografías suyas y dieron detalles puntuales de su apariencia física.
Al momento de la desaparición, la víctima vestía con jean azul, chaqueta azul Adidas y en ambas muñecas manillas de artesanía. Era de contextura gruesa, tez blanca, ojos alargados color miel, nariz delgada, labios medianos y de barba poblada.
También detallaron que medía aproximadamente 1,75, tenía el cabello corto, un tatuaje en forma de estrellas sobre su brazo derecho y en el antebrazo un tatuaje que decía Familia. Precisamente, estos tatuajes fueron piezas clave en el proceso de identificación.
El cuerpo de Blandón Marín fue hallado en la Avenida Regional, sentido sur-norte, en inmediaciones del barrio La Gabriela, norte del Valle de Aburrá. De acuerdo con lo reportado por las autoridades, se encontraba en alto grado de descomposición y antes de ser metido en las bolsas, fue envuelto en cobijas.
Personal del CTI de la Fiscalía acudió al lugar y se encargó de realizar el levantamiento del cuerpo, la inspección técnica de la escena para recopilar evidencias que permita esclarecer las causas del deceso, así como los responsables del crimen.
Así mismo, las autoridades investigan si el cuerpo fue arrojado desde un vehículo, para lo cual revisan las cámaras de seguridad de la zona.
“Estamos caracterizando quiénes son las víctimas, estamos georreferenciando el lugar donde se nos están presentando estos casos, de dónde son, quiénes son estas personas y para esto tenemos nuestro grupo de alertas tempranas de homicidios y un grupo de policía judicial”, manifestó Yiri Amado, directora seccional de Fiscalías Medellín.