Desde el gobierno nacional por intermedio del ministerio de Transporte siguen en el proceso de confirmar si entre los municipios de Urrao y Frontino en el departamento de Antioquia se presentó un accidente aéreo.

“No hay confirmación de la Aerocivil ni de la Fuerza Aérea Colombiana sobre accidente de aeronave alguna”, indican desde el ministerio. Ratifican que ya hicieron las verificaciones en terreno y los respectivos sobrevuelos.

El proceso incluyó un sobrevuelo con un helicóptero UH-60 de la Fuerza Aérea desde la Base de Rionegro, con la cual se adelantó un trabajo de verificación en la vereda El Maravillo, que está a cinco horas de la cabecera municipal de Urrao, donde la comunidad reportó la presunta caída de una avioneta.

Adicionalmente, un avión Cessna C208 Caravan con equipos de alta tecnología, se unió a esta misión de búsqueda en el área rural de Urrao, suroeste de Antioquia, sin encontrar ninguna evidencia.

“En las salas de control tampoco hay aeronaves reportadas como extraviadas”, indican desde el ministerio de Transporte.

La noticia de este presunto accidente se conoció por la publicación de un video grabado por un campesino en donde se observa el momento en que la aeronave se precipita a tierra entre las montañas y termina saliendo un humo blanco que parece ser del momento en el que impacta en el suelo.

Con relación a accidentes aéreos en el país, los más recientes tienen que ver con la aeronave en la que viajaban los cuatro menores indígenas que fueron rescatados en la selva 40 días después de ocurrido el hecho. Este incidente dejó tres personas muertas entre ella la mamá de los menores que se recuperan en el Hospital Militar.

El piloto de la avioneta reportó fallas técnicas, intentó aterrizar de emergencia, pero la aeronave se precipitó a tierra sobre una montaña.

El otro ocurrió cerca al aeropuerto Santa Ana de Cartago. Allí una persona resultó lesionada. Lo que se conoció es que la aeronave era utilizada para labores de fumigación en algunos cultivos de la zona, pero por causas que son materia de investigación su piloto perdió el control y terminó estrellándose en un campo cercano.

Hasta el sitio del accidente llegaron varios integrantes del Cuerpo de Bomberos de Cartago y la Defensa Civil para rescatar al piloto, quien se recuperó satisfactoriamente en la Clínica Comfandi de esta localidad.

Por fortuna, no se encontraba nadie laborando en el cañaduzal donde cayó esta aeronave de fumigación, que está localizado a dos kilómetros de la vía que conduce de Cartago al municipio de Ansermanuevo.

La Dirección Técnica de la Aeronáutica Civil dio a conocer que un grupo de personal experto analizará el accidente, por lo que esta avioneta tipo PA25 con matrícula HK5346 es custodiada por integrantes del Batallón Vencedores de Cartago.

El piloto de la aeronave resultó herido | Foto: Cortesía Bomberos Voluntarios de Cartago

En su cuenta de Twitter el organismo ha comunicado lo siguiente:

“Un equipo de expertos de la @DIACC_COL de la @AerocivilCol asumió la investigación para determinar las causas del incidente de la aeronave tipo PA25 de matrícula HK5346, la cual se precipitó a tierra en Cartago, Valle...”.

Muchas empresas en Colombia utilizan este servicio de avionetas para realizar las labores de fumigación o fertilización, especialmente cuando los cultivos a tratar son demasiado extensos.

Hay países que tienen ciertas limitaciones a esta práctica por los potenciales peligros que se causan al medio ambiente y las personas, debido a la aspersión de agroquímicos o plaguicidas de diversas clases.

Por ejemplo, desde el año 2009, la Unión Europea prohibió esta clase de fumigación en todos sus estados miembros; aunque se mantiene el permiso para ciertos cultivos de modo excepcional, pero de manera muy restringida.

La aeronave era utilizada para labores de fumigación en algunos cultivos de la zona | Foto: A.P.I.

También en Argentina existen muchas limitaciones sobre este particular y se han presentado proyectos de ley para prohibir la fumigación aérea en todo el país, lo cual dejaría en la quiebra a más de 400 empresas que prestan estos servicios. Sin embargo, hay ya 18 provincias en las que no está permitido, entra las que se encuentra Buenos Aires.