Después de un largo periodo de tranquilidad en las redes sociales, volvió a despertar el rifirrafe entre el expresidente Álvaro Uribe Vélez y el alcalde Daniel Quintero Calle. A la discusión se sumó la gestora social de la capital de Antioquia, Diana Osorio Upegui.
Todo empezó este miércoles cuando el mandatario distrital anunció, en su cuenta de Twitter, que durante la administración de Federico Gutiérrez una corporación habría recibido contratos directos para ejecutar el programa infantil de Buen Comienzo.
Se trataría de Presencia Colombia Suiza, donde el núcleo familiar del líder del Partido Centro Democrático figuró en la asamblea y su junta directiva. A juicio del alcalde, esta fundación habría ejecutado proyectos avaluados en 12 mil millones de pesos.
Así lo manifestó: “En la administración de Fico, la Corporación Presencia, que en su junta directiva tenía a la familia Uribe, recibió contratos de Buen Comienzo por 12 mil millones de pesos. Contratación directa”, escribió Quintero Calle por medio de sus redes sociales.
Lo hizo en el momento en que su secretaria de Educación está en el ojo del huracán por presuntos hechos de corrupción al interior de la dependencia, por una contratación con el programa infantil que, entre tanto, habría incumplido las normas de la función pública.
La respuesta del expresidente no se hizo esperar. Él calificó al alcalde de Medellín como un “bribón” -una persona que engaña- por involucrar la trayectoria de Presencia Colombia Suiza en la capital de Antioquia en medio de sus señalamientos.
El mandatario aseguró que la esposa de Uribe Vélez, Lina María Moreno de Uribe, habría sido miembro de la junta directiva; mientras que los dos hijos, Tomás Uribe Moreno y Jerónimo Uribe Moreno, aparecen como integrantes de la asamblea de la corporación.
“Solamente a un bribón se le ocurre comparar la Fundación Presencia Colombia Suiza, que ha servido 40 años a Medellín, con su gobierno ladrón”, manifestó el también exsenador. La familia Quintero Osorio refutó estos argumentos en una alargada discusión.
La esposa de Daniel Quintero y gestora social del distrito, Diana Osorio, salió en su defensa. No es la primera vez que desde ambos bandos políticos se lanzan trinos y pullas que comprometen la administración actual de la ciudad y los falsos positivos.
“Solamente a un bribón le cuesta aceptar la cooptación política que tenía el programa de primera infancia en Medellín. Solo con llamadas de recomendados accedían a más contratación, manejaban a Medellín como a la finca. No somos tus mayordomos”, dijo.
Álvaro Uribe volvió a aparecer para reaccionar a esta última comunicación. Se fue contra Daniel Quintero Calle: “Alcalde sinvergüenza, bribón, no sea cobarde poniendo a su señora Diana a insultar, no la utilice para que le tape sus robos”, manifestó en Twitter.
Nuevamente, llegó al radar Diana Osorio: “Quizá en tu casa, a las mujeres les toca pedir permiso para opinar, en la mía, no”. Quintero Calle se sumó al comentario: “Expresidente, Diana se lo lleva a usted por delante sin que yo le diga nada”, concluyó el alcalde.
La tormenta política se espera que continúe, por el mismo origen de esta discusión. Todo relacionado con los supuestos actos de corrupción que habría identificado la Fiscalía en los manejos del programa de Buen Comienzo, bajo el radar de la Secretaría de Educación.
Mientras el gabinete respalda a ojos cerrados la gestión que adelantó este despacho, varios sectores políticos piden la renuncia de la persona que la tiene a cargo: Alexandra Agudelo Ruíz, quien carga con la presunta responsabilidad de cuatro delitos.
Son dos contratos, que suman 23 mil millones de pesos, los que la enredan ante el ente de acusación. Ambas iniciativas tenían el propósito de entregar paquetes alimentarios a los menores de edad y madres gestantes que estaban matriculados en Buen Comienzo.
Se reaviva una vieja rencilla
El expresidente Álvaro Uribe y el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, revivieron este miércoles su antigua rencilla política. No obstante, contrario a lo que ocurría en anteriores oportunidades, cuando el agarrón era únicamente entre los dos líderes políticos, en esta oportunidad también intervino Diana Osorio, esposa de Quintero.
Todo arrancó cuando Quintero Calle, a propósito de la imputación de cargos a la secretaria de Educación de Medellín, Martha Alexandra Agudelo Ruiz, por supuestas irregularidades en el programa Buen Comienzo, aprovechó para enviar un sablazo al expresidente Uribe.
“Esta administración ha enfrentado a las mafias de la corrupción que se robaban todo, violaban niños, falsificaban documentos y se entregaron contratos entre ellos. Claro que nos perseguirán, denuncian cuentos para entretenernos y que dejemos de investigar. Más nos animan”, publicó el alcalde.
El ambiente subió de nivel cuando el expresidente Álvaro Uribe Vélez le respondió al alcalde y lo llamó “bribón”.
Más tardó el expresidente en trinar que el alcalde Quintero en salir a ripostar de nuevo y aseguró que el uribismo “es un cáncer”: “El problema no son las fundaciones, sino ustedes que se las tomaron para hacer política con los recursos de los niños. El uribismo es un cáncer en metástasis”.
Fue aquí cuando salió la gestora social y esposa del alcalde de Medellín, Diana Osorio, quien también arremetió contra el expresidente Uribe y aseguró que “no somos tus mayordomos”.
¿Uribe para rato?
A pesar de las peleas políticas en las que se ve constantemente inmerso, Uribe confirmó este fin de semana desde Antioquia, su departamento, que su liderazgo político será para rato. Al menos, confesó que no está dispuesto a descansar mientras esté vivo.
En Bello, hasta donde concurrió y se reunió con más de 500 paisas, en medio de las giras regionales que adelanta el Centro Democrático, su partido político, el exmandatario contó que le dijeron que si no iba a descansar. “Hay que esperar el descanso eterno, por ahora, no se dan los descansos en la vida”, expresó Uribe, en medio de los aplausos de quienes lo escucharon.
Desde luego, Uribe demostró que, aunque fue presidente dos veces, influyó en las elecciones de Juan Manuel Santos en su primer gobierno y posteriormente fue clave en las elecciones donde triunfó Iván Duque, sigue con la batería cargada.
Este fin de semana, después de unas cortas vacaciones en Colombia con sus hijos, el expresidente no aguantó más el descanso y salió a encontrarse con sus electores.
Empezó su recorrido por Bello, donde reconoció “que este año será definitivo para el partido, el trabajo tiene que ser consciente, tenemos que recuperarnos en Concejo y Asamblea y participar en coaliciones para ganar la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia”, aseguró.
Para esto, Uribe lanzó sus recomendaciones a sus bancadas de Senado y Cámara en Antioquia. “Vamos a tener que hablar mucho en esta campaña sobre quiénes somos”, dijo.