Integrantes del Ejército Nacional y la Fiscalía General de la Nación detuvieron en la capital de Antioquia a uno de los supuestos jefes políticos de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), cinco días después de que el Gobierno rompiera el cese al fuego.
Él fue identificado con el alias de Relojero o Diego y la captura se dio por una orden judicial. Según las primeras averiguaciones de las autoridades y el material probatorio que fue recopilado, es presunto responsable del delito de concierto para delinquir agravado.
Además de promulgar los intereses de la estructura delincuencial al interior de las filas durante diez años, tendría a cargo el cobro de extorsiones, uno de los principales músculos financieros de la subestructura de Edwin Román Velásquez Valle.
Frente a los argumentos que fueron presentados por el ente de acusación, un juez de la república tomó la decisión de privarlo en un centro carcelario mientras avanzan las investigaciones en su contra y hace contrapeso a los argumentos que lo involucran.
Así lo sostuvo el Ejército Nacional por medio de Twitter: “En desarrollo de nuestras operaciones militares, nuestros soldados lograron la captura de alias Diego, quien sería el cabecilla político del Clan del Golfo y coordinador de cobros extorsivos en la región”.
Por otro lado, tres supuestos cabecillas de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y disidencias de las Farc se escaparon de un batallón militar en la ciudad de Medellín que está a cargo de la Cuarta Brigada del Ejército Nacional. Las autoridades activaron un plan especial de seguridad para recapturarlos y continuar su proceso de judicialización por varios delitos.
El incidente se presentó en las instalaciones del comando de Infantería número diez Atanasio Girardot. Ellos estaban privados de la libertad en este establecimiento por la poca disponibilidad que hay en los centros de reclusión penitenciarios del departamento, cuyo hacinamiento es superior al 200 %.
Los presuntos miembros del Clan del Golfo serían Manuel Fidel Yáñez Días, alias Zarco; y Hernando Javier Mendoza, alias Discover; mientras que el supuesto disidente de las Farc, que estaría enfilado en la estructura quinta, sería Libardo Antonio Correa Mira, conocido dentro de las filas con el alias de Libardo. Los tres están siendo buscados en Antioquia.
La Cuarta Brigada del Ejército Nacional aseguró que, una vez se dio cuenta del suceso, activó las alarmas de manera oportuna. Desde el comando se contactó a la Policía Nacional y a la Fiscalía General de la Nación para tomar las acciones convenientes. Las actividades adelantadas no dan indicios del paradero de los tres supuestos delincuentes.
Ahora bien, en cuanto al procedimiento interno, la institución comentó que está haciendo las averiguaciones con el fin de esclarecer cómo se ejecutó la fuga este domingo: “Este comando ordenó iniciar las investigaciones correspondientes que permitan el esclarecimiento de los hechos en tiempo, modo y lugar”, se lee en un comunicado.
Horas después de este hecho, el Gobierno nacional tumbó el decreto que les puso freno a las operaciones de la fuerza pública contra las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, no por la fuga de los tres presuntos cabecillas, sino por los actos de violencia que esta organización delincuencial protagonizó en la subregión del Bajo Cauca antioqueño.
El director general de la Policía Nacional, general Henry Armando Sanabria Cely, dijo que son dos las estructuras que están detrás del caos que hoy viven las poblaciones del Bajo Cauca y nordeste antioqueño, pero también en el sur de Córdoba. Al menos 300 mil personas se han visto afectadas con el terror que ha impuesto el Clan del Golfo.
Se trata de la unidad de Jorge Iván Arboleda Garcés, que tiene como único líder a alias Marcos y el grupo Uldar Cardona Rueda, bajo el mando de José Miguel Demoya Hernández, conocido con el alias de Chirimoya. Ambos se mueven entre los municipios de Remedio, Zaragoza, Caucasia, Nechí, El Bagre, Ayapel, Montelíbano y Planeta Rica.