Federico Gutiérrez volvió a tomar las riendas de la Alcaldía de Medellín este primero de enero con las promesas de unir a los habitantes tras la polémica administración de Daniel Quintero y destapar las presuntas ollas de corrupción que le habrían dejado en el distrito.
Juró respetar la Constitución y cumplir con sus obligaciones hasta el 31 de diciembre de 2028, lo que daría a entender que no tendría pretensiones para aspirar a la Presidencia en 2026, aunque su nombre retumbará en las discusiones nacionales.
Gutiérrez regresa a La Alpujarra con personas de su entera confianza. El gabinete está integrado por hombres y mujeres cercanas a su proyecto político y con altos estándares técnicos, según lo anunció en el proceso de nombramientos.
Desde hoy, tiene en su agenda tres prioridades: mejorar las condiciones de los programas sociales, reconstruir lo que recibió de herencia de la anterior Alcaldía y avanzar en la construcción de Hidroituango, que aportará el 17 % de la demanda nacional de energía.
Fico tendrá el camino libre en el Concejo. Al contrario de como terminó Quintero, en la corporación tiene las mayorías para tramitar los grandes proyectos para el distrito. Sin embargo, el partido Independientes hará oposición a sus iniciativas.
Aunque no mostró temor por el anuncio porque se sentará a trabajar con todos los sectores: “Vamos a unir a la ciudad y a recuperarla. Mi propósito es muy claro. No más odio, no más división. Esta no es una discusión sobre la izquierda, la derecha o el centro”.
El camino de Fico a la Alcaldía de Medellín
Federico Gutiérrez repite período en la ciudad Medellín. Con un discurso anti-Petro y anti-Quintero conquistó al electorado paisa el pasado 29 de octubre: 689.519 ciudadanos confiaron en su regreso, una votación histórica en el Valle de Aburrá.
Aplastó a sus competidores, así: Juan Carlos Upegui (95.393), Albert Yordano Corredor (27.175), María Paulina Aguinaga (13.004), Gilberto Tobón (11.746), Rodolfo Andrés Correa (10.773), Luis Bernardo Vélez (6.445) y Deicy Elena Bermúdez (4.244).
El triunfo de Fico también se sintió en el Concejo. Bajo la sombrilla de Creemos, su movimiento político, construyó una bancada que será importante en los próximos cuatro años, más los respaldos del Centro Democrático y partidos afines a su legado.
Por el lado de Creemos, se trata de personas muy cercanas a Gutiérrez, muchos pasaron por su gabinete: Andrés Felipe Tobón, María Paulina Suárez, Santiago Perdomo, Alejandro de Bedout, Juan Carlos de la Cuesta, Santiago Narváez y Damián Pérez.
Mientras que en el movimiento que lidera el expresidente Álvaro Uribe, contará con Sebastián López, Claudia Victoria Carrasquilla, Luis Guillermo de Jesús Vélez, Andrés Felipe Rodríguez y Leticia Orrego, todos en oposición al pasado de Daniel Quintero.
No serán discusiones menores las que pasen por la corporación. La más apretada será el futuro de las acciones que EPM tiene en Tigo-UNE, una de las compañías de comunicaciones más importantes del país que no pasa por un buen momento financiero.
Otro de los elementos que llamará la atención desde este primero de enero serán las conclusiones de la auditoría forense que el equipo de empalme de la nueva administración le aplicó a la saliente, donde se advirtió sobre supuesta corrupción e irregularidades.
Aunque se dio cuenta de un presunto hueco fiscal que condicionaría el cumplimiento del plan de desarrollo de Gutiérrez, Daniel Quintero refutó los argumentos y mencionó que él contará con un amplio presupuesto para ejecutar sus iniciativas.
Así también correrán los siguientes meses en la capital de Antioquia: una redada entre los dos bandos por encontrar responsables, mientras que la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría siguen de cerca las denuncias de ambos lados.