Tras cumplirse cinco días de la extradición del máximo cabecilla del Clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, a Estados Unidos, y cuatro días de “paro armado” organizado por hombres que pertenecían a la estructura criminal, el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, se pronunció al respecto.
“Escobar, cuando murió, no se acabó con el cartel de Medellín; ni los paras se acabaron con Castaño, ni el Clan del Golfo se acaba con Otoniel, porque mientras eso está pasando, miles de jóvenes están entrando al conflicto armado, arrastrados por la miseria y desigualdad”, manifestó el mandatario.
En su discurso, el mandatario insiste en que la única solución para disolver a estos grupos criminales es garantizando oportunidades para la niñez en Colombia, de forma que los menores de edad no se vean tentados a pertenecer a estas estructuras criminales.
Reafirmó, además, que los grupos armados deben ser castigados por el reclutamiento de menores: “Para poder resolver el problema, hay que capturar a los cabecillas, sí, pero estimular a los niños para que no entren a los grupos armados y castigarlos muy fuerte cuando recluten menores, ahí es donde está la clave”, señaló Quintero.
Recordemos que Antioquia fue una de las regiones más afectadas por el paro armado. De acuerdo con el informe de la Policía Nacional, en las últimas 84 horas han muerto violentamente cinco personas; entre las víctimas mortales hay un patrullero de la institución y un soldado, mientras que otras ocho personas resultaron lesionadas.
En el país, las autoridades han capturado a 92 personas, 21 de ellas con orden judicial y las restantes en flagrancia.
De acuerdo, con cifras entregadas por la administración municipal, durante 2021 en la ciudad de Medellín, ningún menor de 14 años fue asesinado. Finalmente, Quintero precisó que en Medellín no hubo afectaciones y no opera la estructura criminal del Clan del Golfo.
Clan del Golfo habría anunciado el fin del paro armado
En un comunicado que circula por redes sociales y cuya veracidad está por confirmarse por las autoridades, el Clan del Golfo, también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia, anuncia que da por terminado el paro armado que inició el pasado jueves 5 de mayo y que ha dejado pueblos confinados, al menos cinco muertos y 174 vehículos incinerados en varias carreteras del país.
“Con el fin de las medidas tomadas por nuestra organización hemos decretado levantar el paro armado por petición de la comunidad hasta nueva orden de nuestros compañeros para volver a retomar fuerza contra este estado indolente, han visto el poder que tenemos con el pueblo para detener municipios enteros y a pesar de la decisión tomada seguirnos con nuestra decisión de seguir en la lucha de nuestros intereses. Así le hacemos un llamado a la comunidad para que observen la realidad, ustedes verán la realidad de este gobierno mentiroso”, dice el documento.
Otro documento, firmado por el Bloque Central Urabá, indica que acataría las órdenes del “Estado Mayor” del grupo criminal y daba por terminado el paro armado. “Invitamos a nuestra base social y a la ciudadanía en general a continuar a partir de las 12 de la noche con sus actividades cotidianas”, dice el comunicado.
Igualmente, el texto asegura que “lamentaban”, supuestamente, “el cese de todas las actividades sociales, económicas, educativas y culturales que fueron suspendidas entre el 5 de mayo y el 8 de mayo a las 12 de la noche, por la decisión del gobierno soberbio, nefasto, mezquino por presentar al comandante Otoniel como un gran criminal para justificar su extradición”.