El Ministerio de Transporte entregó detalles del proceso de ampliación que tendrá el aeropuerto internacional José María Córdova de Rionegro (Antioquia), cuya operación está colapsada desde hace varios años por la alta demanda de viajeros.
La solución para atender a los trece millones de pasajeros y a las compañías que pasarán por la terminal es la edificación de una segunda pista. Sin embargo, esa posibilidad está enredada y, de momento, solo se aumentarán unos servicios.
Este proyecto se está tramitando hace siete años y, desde entonces, los terrenos donde se piensa construir están congelados. Aunque el Gobierno nacional tiene el objetivo de apoyar la iniciativa, el panorama no es claro en el territorio.
Lo cierto es que en el Plan de Plurianual de Inversiones se priorizó y se anunció la inversión de 45 mil millones de pesos para temas generales del aeropuerto, incluyendo las intervenciones que arrancarían en el segundo semestre de 2023.
Así lo informó el ministro William Camargo Triana en un debate de control político que el Senado de la República hizo en el oriente antioqueño para llamar la atención sobre el retraso que ha tenido la obra y las inconformidades de la comunidad.
“El inicio de las obras para adecuación y modernización de espacios se tiene previsto para el mes de agosto”, pero la fabricación de la segunda pista de la terminal está en pausa porque se está modificando un informe estratégico.
“Es necesario esperar la actualización del plan maestro para conocer el lugar exacto de esa edificación, al tiempo que se determina el valor comercial de los predios que se comprarían”, dado que tiene información de 2015.
Ahora bien, se intervendrán el área de registro, sistemas BHS, filtros de seguridad nacional e internacional, sala de embarque nacional, sala de reclamo de equipaje nacional, sala de espera, plataforma de fase número uno y centro de conexiones.
También se disminuirá el tamaño de los módulos, se reubicarán las pantallas y redes de información, se instalarán 20 puestos para el registro automático, se construirá un nuevo sistema adicional de bandas y una máquina de rayos X.
Aunque el problema es mucho mayor. Con base en el diseño que hoy tiene el aeropuerto internacional José María Córdova, solo puede recibir a once millones de usuarios. Tal como lo pone en evidencia el plan maestro de la terminal, esos números empezarán a crecer sin freno, por lo que se necesitan acciones que solucionen el problema de raíz.
El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, reconoció que esta es la primera ampliación que se realizará a razón de que el propósito final es construir una segunda terminal y una pista adicional que, de momento, está en la etapa de diseños. En esa iniciativa están enfiladas las alcaldías de Rionegro y Medellín, también el Gobierno.
“Esto es un primer avance acelerado en ampliación de terminal nacional e internacional en la actual terminal. Ya vienen los estudios y diseños para la segunda terminal y segunda pista”, manifestó el mandatario departamental.
Según se conoció, el dinero de este proyecto ya fue girado a la Aeronáutica Civil para que tramite cada una de las obras que fueron aprobadas. Frente al desarrollo de la construcción, no se ha informado si los pasajeros que circulan por el aeropuerto tendrán que transportarse por otros sectores, apenas se está armando el plan de intervención.
“Estas obras representan los resultados iniciales del trabajo técnico y la gestión presupuestal de la Aeronáutica Civil. Esperamos que esta estrategia se materialice pronto, en beneficio de los usuarios y que podamos trabajar con el Ministerio de Transporte”, dijo la Aeronáutica Civil.