Los estudiantes de la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas de la Universidad Nacional de Colombia en la sede de Medellín se declararon en asamblea permanente luego de presentarse denuncias públicas sobre presuntos casos de abuso sexual al interior de las aulas de clase. Las directivas les pidieron a los alumnos retornar al calendario académico.

Esta semana se ha realizado una serie de protestas para rechazar las violencias basadas en género que se habrían dado en la institución de educación superior. La queja de una mujer detonó el malestar de sus compañeros que se suman en una sola voz para pedir justicia y acciones concretas de la Universidad frente al funcionario que es señalado de la conducta.

Mediante un comunicado dirigido a la población universitaria, la Vicerrectoría respondió a las peticiones de los estudiantes y dejó por sentado que la Nacional actúa bajo los principios de la Constitución. Es decir, las decisiones que se tomen en el marco del proceso disciplinario tienen que estar condicionadas al derecho a la contradicción y defensa.

Al contrario de lo que han expresado los manifestantes, ese trámite no se adelanta en las facultades ni en las oficinas de los vicerrectores. Con base en los acuerdos del consejo superior, la competencia es de las oficinas de veeduría disciplinaria de las sedes, el tribunal disciplinario y el tribunal superior.

Juan Camilo Restrepo Gutiérrez, vicerrector de la Universidad Nacional de Colombia en la sede de Medellín, explicó que las etapas del estudio disciplinario empiezan con la instrucción y finalizan en la aplicación de la decisión del juzgamiento. En el primer paso se presenta la denuncia y, si es el caso, se formulan pliego de cargos.

Si la queja sigue caminando, el tribunal disciplinario arma el fallo y su ejecución. Si la defensa reprocha la determinación, el documento pasa a segunda instancia a los escritorios del tribunal superior. Ante este escenario, las directivas no tienen el marco legal para emitir mensajes sobre los procesos.

“Aclaro que no hay ninguna instancia en la sede o del nivel nacional que, bajo las normas actuales de la Universidad, pueda pronunciarse formalmente frente a los casos que se encuentran en la etapa de instrucción, dado que la competencia del pronunciamiento se da en la etapa de juzgamiento y por las instancias competentes”, dijo el funcionario.

En el mismo texto, Restrepo Gutiérrez invitó a los estudiantes a normalizar las actividades académicas y anticipó que los procesos disciplinarios podrían requerir tiempos superiores al desarrollo del semestre dado que la institución está en la obligación de respetar la defensa de las personas señaladas como presuntos victimarios.

De igual manera, solicitó que se sigan analizando y discutiendo las modificaciones a las actuales normas: “Hago un llamado a encontrar soluciones viables a este y a otros temas que hacen parte importante de la vida universitaria en un ambiente de respeto, por lo que rechazo cualquier acto de violencia, venga de donde provenga”, concluyó el vicerrector.

Este escenario se suma a la lluvia de denuncias por presunto abuso sexual en la Facultad de Derecho de la Universidad de Antioquia de parte de funcionarios adscritos a la institución. También las quejas en los colegios públicos de Medellín donde alertan por supuestas vulneraciones de los niños, niñas y adolescentes en medio de las clases.

Frente a este último caso, la Personería del distrito y la Fiscalía General de la Nación anunciaron que están investigando las quejas presentadas por los padres de familia de las víctimas. De igual manera, la Secretaría de Educación aseguró que está acompañando a los afectados de acuerdo con las posibilidades que le da la normativa.