Un grupo de entidades humanitarias, entre ellas la Defensoría del Pueblo, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y una ONG de derechos humanos, recibieron de parte del bloque Roberto Vargas del Frente Yeison Leudo Chaverra, del Clan del Golfo, a dos adolescentes presuntamente involucrados en un delito cometido en el municipio de Caucasia el 6 de marzo.
Los representantes de la Defensoría del Pueblo solicitaron que los dos adolescentes fueran trasladados al Centro Transitorio de Atención al Menor Infractor para que se tomaran las medidas legales correspondientes.
La defensora de familia del ICBF lideran la investigación, mientras que la Defensoría del Pueblo brinda asesoramiento jurídico mediante un defensor público.
Alerta por amenazas del Clan del Golfo
El temor se apodera cada vez más de los pobladores de La Esperanza, municipio de Norte de Santander, por cuenta de las amenazas provenientes de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, conocidas también como Clan del Golfo.
A través de panfletos y audios enviados por redes sociales, el Clan del Golfo declaró a La Esperanza como “objetivo militar”. En los audios se menciona que llevarán a cabo una “limpieza social” contra consumidores de drogas y que asesinarán a aquellos que no cumplan con sus reglas.
El bloque Arístides Meza Páez del frente Édgar Madrid Benjumea del Clan del Golfo mostró su interés de extender su presencia desde Puerto Wilches, Barrancabermeja y Sabana de Torres, en Santander, a municipios como La Esperanza en Norte de Santander; y San Alberto y San Martín, en el departamento de Cesar.
Ante esta situación, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, emitió la Alerta Temprana de Inminencia y solicitó al Ministerio del Interior que se proteja a los residentes en los sectores urbanos de La Feria I, Feria II, Santa Inés, San Antonio, Caño Hacienda y Tienda Nueva y en el corregimiento La Pedregosa.
El defensor Camargo también pidió a las autoridades que adopten medidas preventivas y de reacción rápida ante los factores de riesgo advertidos desde el Sistema de Alertas Tempranas, con el fin de prevenir y conjurar los riesgos y amenazas.
“La situación es crítica y ya se han registrado graves hechos de violencia en esa población. El pasado 25 de enero, por ejemplo, fueron asesinados cinco jóvenes que, presuntamente, estaban consumiendo marihuana en un punto conocido como La Batea, en el barrio La Feria”, recordó Camargo.
Asimismo, se enviaron solicitudes a la Alcaldía de La Esperanza, a la Gobernación de Norte de Santander, a la Unidad para la Atención y Reparación Integral de Víctimas, a la Fiscalía General de la Nación, a la Procuraduría y a la Personería, para que atiendan y acompañen a las víctimas, investiguen los casos, individualicen y judicialicen a los responsables de las amenazas y ataques. Además, para que hagan seguimiento a las acciones de las autoridades en la implementación de medidas de prevención y protección a favor de la población civil.
Cayó almacenista de armas del Clan del Golfo
Alias Águila es señalado de formar parte de la subestructura Nicolás Urango Reyes del grupo criminal Clan del Golfo. De acuerdo con las investigaciones, Rodríguez Gómez es conocido por ser uno de los principales almacenistas de armas de fuego y drogas en la región.
El pasado 13 de febrero, la Policía Nacional llevó a cabo una operación en el barrio La Carolina de Cartagena y logró capturar a Rodríguez Gómez en su casa. Durante el allanamiento, se encontraron numerosas pruebas que confirmaban las sospechas de la Policía y la Fiscalía. Se hallaron sustancias alucinógenas como cocaína y marihuana, 11 cartuchos calibre 9 mm, 25 cartuchos calibre 5.56 y una trilladora.
Alias Águila fue llevado ante un juez de control de garantías, donde la Fiscalía le imputó los delitos de tráfico, fabricación y porte de arma de uso privativo, tráfico, fabricación y porte de arma de fuego agravado y tráfico, fabricación y porte de estupefacientes.
Después de una audiencia, el 3 de marzo, el juez ordenó su detención preventiva en una cárcel de alta seguridad mientras continúa el proceso judicial en su contra.