Los vecinos de las unidades residenciales que habrían sido mal construidas siguen pagando los platos rotos en Medellín: el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres emitió una orden de evacuación preventiva a los inmuebles que están ubicados en las inmediaciones del edificio de Boston, desalojado el martes por deterioro.
De acuerdo con el informe divulgado por la Administración del Distrito, las personas que tienen relación con doce inmuebles del sector no tienen autorizada la permanencia a razón de que las condiciones de seguridad no están dadas. El retorno se dará cuando un ingeniero experto en estructuras entregue los resultados del estado de la construcción.
El retiro aplica para seis viviendas que están localizadas dentro de la misma edificación, cinco establecimientos comerciales y una casa que está a un lado del conjunto de cinco pisos que empezó a mostrar las primeras señales de alarma en la noche del pasado 27 de septiembre, con un fuerte estruendo y el movimiento de la superficie.
Walter Pérez, subdirector de Conocimiento y Gestión del Riesgo de Desastres de la ciudad, explicó que las medidas de mitigación se tomaron en la mañana de este miércoles para preservar la integridad física de las familias. Anticipó que las unidades sociales de la Alcaldía acompañarán a las personas que acojan las recomendaciones de los expertos.
“La edificación con problemas estructurales tiene seis viviendas, en una de las cuales no se tiene registro de sus habitantes porque están por fuera de la ciudad. Hasta el momento, se tiene registro de 22 personas a quienes se indicó salir del lugar: 20 del edificio y dos más de la vivienda vecina”, mencionó el funcionario del distrito de Medellín.
No entregó mayores detalles de las condiciones físicas de la estructura a razón de que deben ser los propietarios quienes gestionen los estudios pertinentes, porque es un predio privado, pero la Alcaldía anticipó que estará cercana al proceso porque la exposición del riesgo es alta para todo aquel que tenga relación con el inmueble del barrio Boston.
Esta crítica condición se suma a la que vive la unidad residencial Continental Towers, edificación que será demolida en las siguientes semanas, ya que representa un riesgo para los habitantes del barrio El Poblado. La decisión se tomó luego de nueve años de que el inmueble fuera evacuado, con el respaldo de una declaratoria de calamidad pública.
Mientras eso pasa en estos sectores de la ciudad, en otros nueve barrios los organismos de socorro les ponen la lupa a otras edificaciones que tienen problemas estructurales, de los cuales cuatro comparten la misma orden de evacuación para reducir el riesgo ante el inminente colapso que han puesto en evidencia los estudios técnicos.
Esa situación se vive en los conjuntos residenciales de Asensi, Kampala, Mantua, Continental y San Miguel del Rosario. De esta última, con base en la información emitida por la Alcaldía de Medellín, se espera que las labores de reforzamiento finalicen el próximo año para que las familias puedan retornar, encabezadas por el constructor.
Carlos Muñoz, subdirector de Manejo de Desastres del distrito, explicó que el grupo especializado en riesgo sísmico y daño estructural es el encargado de hacerles seguimiento a los inmuebles que tienen riesgo de colapso. Esa lista la complementan otros cinco inmuebles que, de momento, no amenazan con desprenderse, pero hay amenazas.
“Presentan diferentes condiciones y características. En esencia, son deficiencias estructurales que nos han llevado a recomendar la evacuación de cinco de ellos y que hoy se mantienen en esta condición. Nuestro propósito siempre será salvar vidas”, dijo el funcionario de la Alcaldía de Medellín en medio de las emergencias de las últimas horas.