Este viernes se expidió la orden de captura en contra del ciudadano extranjero que fue hallado con dos menores de edad al interior de un hotel del barrio El Poblado de Medellín. SEMANA conoció en primicia los delitos por los que lo procesará la Fiscalía General de la Nación.
Aunque Timothy Alan Livingston fue dejado en libertad poco tiempo después de verlo con las niñas dentro de un jacuzzi por no tener evidencia de delito, el ente acusador tiene pruebas que demostrarían que este hombre, supuestamente, sí habría incurrido en dos infracciones que son duramente castigadas por el Código Penal colombiano.
Se trata de posible demanda de explotación sexual con menor de 14 años y actos sexuales con menor de 14 años. En dado caso de comprobar estas faltas, el estadounidense podría enfrentar una larga condena. El primer delito suma entre 14 y 25 años de pena, mientras que el segundo va de 9 a 13.
Tras dejar en firme la orden de captura, las autoridades expedirán una circular azul de Interpol para localizarlo y proceder con la captura en Estados Unidos, donde permanece desde el pasado 29 de marzo, el día en que anticipó su regreso a casa tras el problema que tenía encima.
Son muchas dudas las que rodean este proceso. Una de ellas son las razones por las cuales la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá no notificó a tiempo a la Fiscalía de la conducta de Livingston y lo dejó en libertad, pues alcanzó a detenerlo por 12 horas; el primer argumento es que no se encontraron indicios de un delito.
Sin embargo, SEMANA tuvo acceso a testimonios y registros de cámaras de seguridad que, según expertos, sí sembrarían dudas sobre lo acontecido en el piso quinto del edificio Gotham.
Todo arrancó a altas horas de la noche del 27 de marzo, cuando el extranjero llevó a dos mujeres a la recepción del inmueble para subir al apartamento que había rentado. El vigilante les negó el paso porque las jóvenes no tenían cédula colombiana ni un pasaporte.
El extranjero no se rindió y esperó hasta la madrugada del siguiente día, cuando ya no estaba el guarda de seguridad, para violar los filtros e ingresar a otras dos personas, quienes son las menores de edad de 13 y 12 años. Ellas estuvieron a solas con el gringo por una hora.
La cámara instalada en un ascensor identificó la salida de las niñas: se les vio con el cabello aparentemente mojado y contando varios billetes. Nuevamente, volvieron a entrar al inmueble en horas de la tarde de ese 28 de marzo y fue en ese momento cuando la Policía Nacional descubrió la escena.
Ellas estaban dentro de un jacuzzi con el sujeto. Los testigos vieron condones usados en el piso, percibieron un intenso olor a marihuana y vieron rastros de tusi, la sustancia conocida como la “cocaína rosa”.
Con todo esto, en las calles y redes sociales hay clamor para que se haga justicia. El presidente Petro solicitará la extradición del hombre y la Fiscalía hará esfuerzos para judicializarlo.