El Vaticano absolvió canónicamente al sacerdote Carlos Arturo Yepes Vargas de tres denuncias que lo vinculaban con casos de presunto abuso sexual, al no encontrar elementos probatorios que sostuvieran los escandalosos señalamientos.
Él fue vinculado a un proceso de investigación por supuesta pederastia. Uno de los testimonios que lo enredó al interior de la Iglesia fue el de Hernán Morales, quien aseguró que habría sido una de sus víctimas cuando se desempeñó como monaguillo en 1995.
Frente a este escenario, fue suspendido de sus ejercicios canónicos en 2020 mientras se resolvía su proceso. El 23 de diciembre de 2022, el colegio de jueces de la Santa Sede desestimó su responsabilidad en los hechos al determinar que “no consta la acusación”.
Ahora bien, en un documento emitido en las últimas horas por la Arquidiócesis de Medellín, se oficializó la decisión y advirtió que podrá retomar sus funciones. Así lo afirmó el padre Carlos Arturo Yepes Vargas, famoso por conducir programas de televisión.
“Las autoridades del Vaticano han fallado por unanimidad sobre la verdad y limpieza de mi sacerdocio frente a las acusaciones difamatorias de un reconocido perseguidor de la Iglesia y sus falsos testigos que habían declarado en mi contra”, manifestó el cura.
También dijo, por medio de sus redes sociales, que la situación que vivió recientemente podría estar enmarcada en un presunto proceso de persecución cristiana que tendría el propósito de sembrar dudas sobre la “vida moral” de los sacerdotes.
Aunque su nombre permanece en la lista de los 36 religiosos, adscritos a la Arquidiócesis de Medellín, que están siendo investigados por el Vaticano y la Fiscalía General de la Nación por presuntos casos de abuso sexual contra menores de edad.
La lista
La Arquidiócesis entregó los nombres de los presbíteros que abusaron de menores de edad en los últimos 30 años en el Valle de Aburrá, también dio a conocer la identidad de los religiosos que están siendo procesados por presuntos hechos de pederastia.
La revelación está marcada por una polémica, dado que la Iglesia católica entregó los documentos secretos a regañadientes, después de un pleito judicial que sostuvo por varios meses monseñor Ricardo Tobón Restrepo con el periodista Juan Pablo Barrientos.
En un archivo de cinco páginas, se puso en evidencia que 36 sacerdotes han sido señalados como presuntos emisores de delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes desde 1992 hasta la fecha. Sin embargo, once casos fueron descartados.
Con base en el derecho canónico, 19 de los curas referenciados por la Arquidiócesis de Medellín cargan con la pena de pederastia a razón de que desde Roma se comprobó su responsabilidad en el delito: siete se quitaron la sotana luego de la resolución de la Iglesia; cinco ya cumplieron con la sanción y los siete restantes están pagando por su conducta.
En los documentos aparecen los nombres de Wilver Acosta Grajales, Sergio Garcés Botero, Rubén Andrés Bedoya Castrillón, Roberto Antonio Cadavid Arroyabe, Próspero Enrique Arboleda Giraldo, Luis Gabriel Molina Cano, Leonardo Pérez Acevedo, Juan Diego Rodas Rojo, Juan Carlos Muriel Figueroa y José Rafael Vasco Zamudio.
Mientras que los otros cuatro restantes de la lista están siendo investigados como supuestos responsables de pederastia. En las casillas resaltan Carlos Arturo Yepes Vargas, Jhon Jaime Giraldo Zuluaga, Julián Darío Gómez Mejía y Mario Castrillón.