El alcalde electo de la capital de Antioquia, Federico Gutiérrez, advirtió que las finanzas del distrito pasan por un mal momento por cuenta de los presuntos hechos de corrupción que rodean la gestión de los últimos cuatro años.
Según los informes de su equipo de empalme, se habría identificado una desfinanciación de $ 2,86 billones en proyectos y un déficit cercano a los $ 412 mil millones en las entidades del conglomerado público.
Faltaría dinero para operar con normalidad en 2024 en la Secretaría de Educación, Secretaría de Mujeres, Secretaría de Salud, Secretaría de Movilidad, Sapiencia, Programa de Alimentación Escolar, Inder y Metro de la 80.
Los saldos negativos también se tienen en seis organizaciones que estarían en riesgo de liquidación: Telemedellín, Hospital General de Medellín, Metrosalud, Empresa de Desarrollo Urbano, Instituto Social de Vivienda y Hospital Infantil Concejo de Medellín.
Gutiérrez anticipó que las muestras de las supuestas irregularidades serán trasladadas a la Fiscalía General de la Nación, Contraloría General de la República y Procuraduría General de la Nación para que adelanten las respectivas investigaciones y establezcan los posibles responsables.
Aunque varios de los procesos que están bajo su lupa ya están en el radar de los entes de control, varios exfuncionarios ya están imputados por la presunta comisión de diversos delitos.
“Desorden inmenso”
El mandatario electo reveló que el proceso de empalme no se ha desarrollado con normalidad porque habría trabas para acceder a la información de las entidades públicas de la ciudad.
Por ejemplo, en Metroparques, una de las oficinas más cuestionadas, solo se permitió que se diera una reunión entre ambos equipos y la dirección se habría negado a propiciar nuevos encuentros.
“Seguiremos entregando nuestros hallazgos a las entidades de control y serán estas las que se encarguen de abrir o continuar las investigaciones pertinentes. A nosotros nos corresponde resolver los problemas, cubrir las necesidades sociales, y eso haremos”, dijo.
Los hechos que más preocupan
La nueva Alcaldía tiene especial interés por resolver los problemas que hay en materia de salud, dado que hay preocupación por la prestación de los servicios en el Hospital General, Metrosalud y Hospital Infantil Concejo de Medellín.
Allí, la cartera pública estaría al límite y algunos funcionarios tendrían el propósito de frenar sus actividades por las demoras en el pago de los salarios. Frente a este escenario, Fico pidió paciencia hasta que pueda tomar el control. Eso no será hasta el mes de marzo, el momento en que podrá modificar la planta directiva y reajustar el camino, pues cree que ha actuado mal.
También denunció que el Metro de la 80 estaría desfinanciado en $ 1,1 billones y no cumpliría con la fórmula establecida en la Ley de Metros. Es decir, el distrito tendría que aportar mucho más del 30 % para sacar adelante este proyecto en comparación con lo que aportaría la nación. Además, la gestión predial tendría retrasos, en promedio, de un año.
Finalmente, destacó que la línea ética activada por el equipo de la administración entrante ha recibido más de 120 quejas anónimas sobre presunta corrupción y supuestas irregularidades al interior del conglomerado público.
“A pesar de este difícil panorama, quiero dejar un mensaje de optimismo: ya nosotros, con nuestro equipo de expertos, hemos ido entregando a las autoridades estos y otros hallazgos. La prensa también ha hecho un gran trabajo. Incluso la ciudadanía ha estado muy activa. Ya esto será tarea de los organismos de control. Nosotros vamos a llegar es a trabajar. Va a ser difícil recuperarnos, pero estamos más unidos que nunca como ciudad y lo vamos a lograr. Vamos para adelante”, concluyó el alcalde electo.