La Policía Nacional frenó la comercialización de una tonelada de marihuana en la capital de Antioquia que estaría avaluada en 900 millones de pesos. Una investigación de varias semanas terminó en una persecución de película en las carreteras del departamento.

El operativo inició en el Eje Cafetero cuando se obtuvo información de un sospechoso automotor que había salido del Cauca. Las unidades de inteligencia descubrieron la placa y la distribuyeron con los uniformados para estar atentos a su recorrido.

El conductor cayó en un puesto de control en la vereda La Oculta de Támesis, y cuando se le solicitó un registro, emprendió la huida. Tras la intensa presión de la fuerza pública, no le quedó más remedio que abandonar la mercancía y perderse del mapa.

Incautación de marihuana en Medellín. | Foto: Cortesía: Policía Antinarcóticos.

Al poner la lupa sobre el camión, se descubrieron ochenta costales con 1.449 paquetes de diferentes tamaños con marihuana que pesaban 1.500 kilos. Además de este material, se decomisó el automotor de color blanco con azul, una motocicleta y un celular.

“Con esta incautación, se logró evitar la circulación de 1.500.000 dosis en las calles de Colombia, especialmente en la ciudad de Medellín”, detalló el director de Antinarcóticos de la Policía Nacional, brigadier general Nicolás Zapata.

En lo que va corrido del año, esta institución ha logrado frenar la comercialización de 192 toneladas de marihuana. Para seguir avanzando, se invitó a la ciudadanía a denunciar los casos relacionados con el tráfico de estupefacientes y otros elementos irregulares.

Así se mueve el fentanilo en Colombia: radiografía de la sustancia que enciende las alarmas en el país

El director de Antinarcóticos de la Policía Nacional, general Nicolás Arrieta Zapata, también reveló en SEMANA la manera en que se está comercializando el fentanilo en Colombia, una sustancia que es 50 veces más potente que la heroína y puede llevar a la muerte al consumidor.

En esta región, el opioide está limitado al manejo hospitalario para tratar dolorosas enfermedades. Sin embargo, en los últimos días, algunos sujetos lo están desviando irregularmente para el uso recreativo sin medir las peligrosas consecuencias.

Los investigadores han identificado dos puntos de emisión del fentanilo. En primer lugar, hay 89 denuncias que advierten sobre el robo del medicamento desde las clínicas. Además, sujetos estarían burlando la seguridad de las fronteras para ingresarlo de manera ilegal.

En el último caso, la sustancia está llegando en ampolletas camufladas en encomiendas provenientes de Estados Unidos, Argentina, Chile, Uruguay y Ecuador con destino a Sucre, Risaralda, Antioquia, Bolívar, Valle del Cauca y Norte de Santander, donde la han incautado.

Fentanilo en Barranquilla. | Foto: Cortesía: Policía Nacional.

El general Nicolás Arrieta Zapata indicó que, de una unidad, salen hasta veinte porciones: “Una dosis puede estar costando entre 250.000 y 400.000 pesos, más o menos. Eso hace entender que la persona que accede a ella no es una persona de bajos recursos”.

Los estudios preliminares pondrían en evidencia que el fentanilo estaría siendo mezclado en Colombia con estupefacientes. La presentación más común es con tusi –la denominada cocaína rosa– que lo convierte en un coctel tóxico. Así se ha encontrado en Medellín.

El director tiene información que sostendría que las ventas estarían concentradas en las redes sociales por medio de mensajes cifrados: “Tenemos identificados 400 perfiles de internet que estaban comercializando este tipo de drogas sintéticas”.

Para frenar la circulación, la entidad está capacitando a sus hombres y caninos para que puedan identificar la sustancia que supone un reto mayor para la institución. Ellos han recibido formación de expertos mexicanos y estadounidenses.