Alias Negro Cristián, Claudio Alonso Maturana, estaría dispuesto a someterse a la justicia. Este hombre es sindicado de fundar la organización delincuencial de Los Caparros, que atemoriza con acciones violentas a los habitantes de la subregión del Bajo Cauca antioqueño.

Así lo dio a conocer en una carta pública que tiene la firma de su defensora. En 12 líneas sentó las condiciones para presentarse ante las autoridades, tras haberse fugado desde el mes de agosto de este año del sitio domiciliario donde estaba recluido por haber protagonizado un supuesto homicidio en esta misma zona del departamento.

En el primer punto habla de garantías condicionando su participación en el programa si cuenta con el respeto al debido proceso y a la presunción de inocencia por parte de los organismos que lo escucharán. Es decir, que no lo acusen de supuestas conductas que habría cometido hasta que no se demuestre su presunta participación.

“Deseo someterme o entregarme de forma voluntaria a las autoridades, siempre y cuando se haga el requerimiento pertinente que se ha informado por los medios de comunicación y las autoridades pertinentes, y que no se lleguen a vulnerar mis derechos constitucionales”, se lee en el documento difundido en el Bajo Cauca.

Este sujeto carga con un prontuario criminal desde el 2017, según lo ha revelado la Policía Nacional. Al parecer, en ese año se desligó de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia para darle forma a Los Caparros. Con un nombre distinto se habrían coordinado acciones delincuenciales, como el tráfico de estupefacientes a gran escala y minería ilegal.

El seis de noviembre de 2019 fue capturado. Ante los ojos de la Fiscalía, Claudio Alonso Maturana Hurtado habría estado relacionado en el homicidio de Ángel Alberto Zuleta Mesa. Este asesinato se cometió cuando la víctima iba conduciendo el vehículo de su tío, el entonces alcalde del municipio de El Bagre, por el corregimiento de Puerto Claver.

“Los funcionarios lo ubicaron en el barrio Aranjuez, quien se identificó con una contraseña a nombre de Wilson Andrés Hurtado Andrade. Como los policiales ya tenían información sobre el posible cambio de identidad del procesado, fue sometido a cotejo de huellas dactilares y se logró establecer a Maturana Hurtado”, se lee en el expediente.

En medio de las audiencias que se adelantaron en un juzgado de Medellín, él contrarió los argumentos de la Fiscalía. Sin embargo, el juez ordenó su reclusión en una cárcel del departamento. Detrás de las rejas también habría protagonizado una lluvia de delitos contra las poblaciones del Bajo Cauca antioqueño a nombre del grupo armado.

A finales de abril de este año, la comandancia de la Séptima División del Ejército Nacional denunció que alias Negro Cristián estaría extorsionando a finqueros y comerciantes del municipio de Caucasia desde su centro de reclusión. Al parecer, con videollamadas presionaba a las víctimas a entregar altas sumas de dinero a sus hombres.

A pesar del material probatorio que hay en el proceso judicial, en agosto un juez le otorgó el beneficio de la casa por cárcel. La orden de salida de la cárcel que se emitió a favor de Claudio Alonso Maturana Hurtado habría caído como una bomba en la subregión. Presuntamente, volvió para retomar el control de las rentas criminales.

Pero el Clan del Golfo se habría metido en sus intereses. Con base en la información emitida por la Policía Nacional, este hombre habría ordenado combatirlos para borrarlos del mapa. En ese momento habrían escalado los índices de violencia.

Frente a ese escenario, la Gobernación está dispuesta a entregar hasta 100 millones de pesos por información que ayude a identificar su paradero para judicializarlo nuevamente.