Un nuevo caso de presunto acto sexual abusivo contra una menor de edad sacude al departamento de Antioquia. En las últimas horas, un funcionario del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) fue detenido luego de que se le vinculara con violentar en 50 oportunidades, presuntamente, a una niña de 13 años en el municipio de Bello.
De acuerdo con la investigación adelantada por el Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual de la Fiscalía y la denuncia de la familia afectada, los hechos delictivos se habrían presentado en una vivienda de esta población del norte del Área Metropolitana del Valle de Aburrá entre los meses de marzo y julio de este año.
Al parecer, aprovechó el segundo trimestre de 2022 para realizarle tocamientos de carácter sexual a la hija de su entonces compañera sentimental que en el momento en que habrían acontecido las situaciones que hoy lo tienen en una cárcel del departamento, la menor de edad tenía 13 años. Él contrarió los argumentos del ente de acusación.
“Los abusos se habrían presentado en horas de la mañana cuando el presunto victimario iba hasta la habitación de la adolescente con el pretexto de despertarla para que se alistara para ir al colegio”, anunció el director de la seccional Medellín de la Fiscalía General de la Nación, Ricardo Romero Moreno.
Al procesado de 43 años le sumaron el delito de actos sexuales con menor de 14 años agravado y en concurso homogéneo y sucesivo. En medio de las audiencias que se realizaron esta semana, el dragoneante del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario se declaró inocente.
Pero un juez de la República, con base en el material recopilado por el ente de acusación, resolvió enviarlo a un sitio de detención en la capital de Antioquia mientras avanzan las investigaciones en su contra dado que podría afectar el proceso que es materia de estudio. Él podrá refutar los señalamientos de las unidades de la Fiscalía.
Según las estadísticas del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en lo que va corrido de este año, se han atendido en Medellín cerca de 509 denuncias por presunto abuso sexual. No obstante, esta cifra no representa el fenómeno delictivo a razón de que todos los casos que se presentan no son alertados ante las autoridades.
En cuanto a los crímenes cometidos contra los menores de edad en el Valle de Aburrá, esta entidad suma 167 hechos de violencia de enero hasta julio de 2022. Mientras que los datos recopilados también suman como víctimas a los adultos mayores con 103 casos y a más de 1.200 personas en el marco de violencias en medio de relaciones sentimentales.
Prueba de las situaciones acumuladas en Medicina Legal es la condena que recibió un comerciante de 56 años en Medellín la semana pasada por cometer actos sexuales violentos agravados contra una menor de once años. Un juez le impuso 10 años y 8 meses de prisión que deberá cumplir en un centro carcelario de la ciudad.
“Según la investigación adelantada por un fiscal del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas), el 25 de diciembre de 2021, en el barrio Pablo Escobar de la capital antioqueña, el procesado le realizó tocamientos de carácter sexual a una menor de 11 años”, señaló la seccional del ente de acusación en el Valle de Aburrá.
Tal como se pudo probar en un juzgado penal del circuito de Medellín, esos hechos ocurrieron cuando la víctima ingresó al baño de un establecimiento comercial, quien aprovechó la situación para taparle la boca a la menor y tocar sus genitales por la fuerza. La decisión de primera instancia fue apelada por la defensa.