El mandatario de los antioqueños, Aníbal Gaviria Correa, tomó partido en el escandaloso proceso judicial que enfrentan los exfuncionarios públicos que son cuestionados por la Fiscalía General de la Nación, en medio de dudas sobre el procedimiento que les dieron a contratos del megaproyecto de Hidroituango, próximo a encender dos de sus turbinas.

Las palabras de solidaridad fueron emitidas en su cuenta de Twitter a favor del exalcalde de Medellín, Fabio Alonso Salazar Jaramillo; al exgerente general de las Empresas Públicas de Medellín (EPM), Federico José Restrepo Posada, y al exgerente del Idea, Álvaro de Jesús Vásquez Osorio, señalados por el ente de acusación como presuntos responsables del delito de interés indebido en la celebración de contratos.

Si bien los procesados refutaron los argumentos presentados por una unidad delegada ante la Corte Suprema de Justicia, los investigadores insistieron que las tres personas –junto al exgobernador de Antioquia y hoy condenado por parapolítica, Luis Alfredo Ramos Botero– incurrieron en la falta que deberán desmentir en un juicio.

El material probatorio recolectado daría cuenta que los implicados habrían intervenido en las discusiones que permitieron celebrar un contrato que tenía un beneficiario directo: EPM. Así las cosas, los cuestionamientos están fijos, porque se habrían desconocido los principios de transparencia, planeación, responsabilidad y selección objetiva.

Ahora bien, el gobernador de Antioquia expresó que se estaría cometiendo una injusticia contra Fabio Alonso Salazar Jaramillo, a quien reemplazó en la silla de la Alcaldía de Medellín cuando ejerció como mandatario local entre 2012 y 2016. Salazar le entregó a Gaviria la presidencia de EPM que, por esa época, ya tenía el manejo de Hidroituango.

“Es un gran ser humano. Como servidor público y alcalde de Medellín: valeroso, íntegro, intachable, de profunda sensibilidad; como escritor: magistral analista y cronista de nuestra realidad. Duele, duele berracamente la injusticia contra él, que es contra todos”, se lee en el trino de Aníbal Gaviria Correa, en el que también adjuntó una frase sobre la justicia.

Minutos después, las palabras del gobernador cobijaron a Federico José Restrepo Posada. “Siempre riguroso, amable, pero franco y firme. Gerente eficiente, servidor público íntegro, con visión y capacidad de ejecución. Solidaridad y la seguridad total de su transparencia e inocencia”, agregó el funcionario.

El último turno llegó para el exgerente del Instituto para el Desarrollo de Antioquia, Álvaro de Jesús Vásquez Osorio: “He tenido diferencias, en algunos casos diferencias profundas, con el doctor Álvaro Vásquez Osorio. No coincidimos ni política ni ideológicamente. Tal vez por ello, precisamente con más énfasis, le manifiesto mi solidaridad y mi convicción de que demostrará su inocencia”.

Cobran interés las declaraciones de Aníbal Gaviria Correa, porque es la voz visible del accionista mayoritario de la hidroeléctrica de Hidroituango, negocio en el que invirtieron plata la Gobernación y el Idea, una entidad pública fundada para impulsar el desarrollo regional mediante el financiamiento de obras en el departamento.

Al contrario, el presidente de la junta directiva de las Empresas Públicas de Medellín, Daniel Quintero Calle, celebró el trámite que está dando la Fiscalía. Sin embargo, aseguró que en la lista de investigados faltarían otros nombres, entre ellos el de Federico Gutiérrez y el del exgerente general de EPM Jorge Londoño de la Cuesta.

El mandatario distrital dijo que las autoridades deberían tener sobre la mesa los trámites que adelantó el excandidato presidencial en el proyecto de generación de energía cuando tuvo en sus manos las riendas de la ciudad.

Entre el primero de enero de 2016 y el 31 de diciembre de 2019, Gutiérrez presidió la junta directiva de EPM y acompañó los pasos trascendentales que dio Hidroituango en medio de la crisis que se dio por el taponamiento del túnel de desviación, causado por un deslizamiento al interior de la obra.