Las personas que estén internadas en las E.S.E. Hospital Marco Fidel Suárez del municipio de Bello, Antioquia, podrán atender la visita de sus mascotas de compañía dado que los especialistas reconocieron que los animales ayudan a la recuperación de los pacientes.
La visita será de 30 minutos diarios y contará con el acompañamiento del equipo psicosocial de la entidad, que trabajará para fortalecer el vínculo emocional y el cumplimiento de los protocolos de seguridad para que ambos estén en buenas condiciones.
Para acceder al servicio, los internos deben agendar la visita que se lleva a cabo por fuera de la habitación: la administración dio apertura a una nueva sala donde hay sillas y mensajes alusivos a la importancia de las mascotas en la recuperación de los humanos.
“El proceso de hospitalización es un evento estresante tanto para el paciente como para el grupo familiar, ya que cambia su rutina diaria y lo sitúa en un ambiente desconocido, expuesto a situaciones de miedo por su diagnóstico, los procedimientos, dolor y separación de sus seres queridos, incluidos sus animales”, explicó el primer centro hospitalario del norte del Valle de Aburrá en implementar la medida.
En ese sentido, los médicos detallaron que la visita de las mascotas tiene una serie de beneficios terapéuticos a nivel psicológico y social durante la hospitalización: disminuyendo la angustia, los signos de estrés, mejorando el estado de ánimo y alejando la sensación de ansiedad. Incluso, puede disminuir el estrés en los profesionales de la salud que acompañan la hospitalización.
“Acariciar a un animal favorece el aumento de ciertas hormonas como la oxitocina, la serotonina, la dopamina, las endorfinas, la prolactina y los neurolépticos, provocando sensación de bienestar y tranquilidad en el paciente”, mencionó el equipo de especialistas del Hospital Marco Fidel Suárez.
De eso da cuenta María Teresa Pérez Herrera, quien ajusta cuatro días internada en el centro médico. Abi, su fiel compañera, la sorprendió en los pisos de la entidad y de inmediato sitió los efectos del recibimiento.
“Traérmela para acá es algo muy agradable y me subió los ánimos, es una motivación muy grande que me permitan tenerla acá conmigo, aunque sea corto el tiempo, pero puedo estar con ella”, dijo la mujer.
Emotivo reencuentro de un hombre con su perro en hospital de Armenia
Una conmovedora historia se ha vuelto viral en redes sociales luego de que un adulto mayor se reencontrara con su perro, tras haber estado internado en un hospital en Armenia, Quindío.
Se trata de Adolfo Murillo Velásquez, quien sufrió una infección pulmonar, razón que lo obligó a internarse en el hospital San Juan de Dios. Mientras tanto, su mascota, un perrito llamado Moisés, quedó sin quien lo cuidara, por lo que un refugio de animales lo acogió y, por el momento, este peludo se encuentra viviendo en ese lugar.
Entre tanto, luego de varios días de que Murillo estuviera internado en el hospital, desde el refugio de animales arreglaron el encuentro para este adulto mayor pudiera saludar y abrazar a su mascota.
Este hombre fue alistado y llevado en una silla de ruedas hasta la entrada del hospital, en la que su perro, ansioso, llegó y lo reconoció de inmediato.
Mientras el perro lo saludaba emocionado, Adolfo Murillo solo lo abrazaba con fuerza y cerraba los ojos de la emoción de encontrarse con su fiel amigo.
En ese mismo momento, la mujer que está encargada del refugio le dijo: “Ahí le trajimos a su perrito, lo tenemos muy bien cuidado, no se preocupe”. Luego, en el video compartido en redes sociales, este adulto mayor recalca que su perro, Moisés, es “muy noble y muy entendido, muy mimado, consentido. Él donde lo acaricien ahí está, está superbién Moisés”, afirmó para el video sobre el comportamiento de su mascota, mientras se le veía feliz.
Adolfo Murillo también recalcó que su mascota se llamaba Moisés porque luego de haber sufrido de moquillo, una enfermedad contagiosa en animales domésticos que afecta las vías respiratorias y el aparato digestivo, el perrito había logrado salvarse, y por eso decidió ponerle un nombre de origen bíblico, para resaltar su hazaña.