Hay preocupación en las autoridades de Cúcuta por la extraña desaparición del norteamericano Abraham Coakley, de 27 años de edad. Había llegado a esa ciudad desde el pasado 28 de diciembre.
Según los familiares del hombre que se desempeñaba como docente, la última vez que se comunicaron con él había ingresado a un hotel de la ciudad, donde perdieron su rastro. Por otro lado, la madre de Abraham había notificado que se encontraba perdido en la frontera y que temían que fuera producto de la falta de una vitamina que a veces no produce su cuerpo y que le provoca pérdida de la memoria.
De acuerdo con un comunicado de la Policía Metropolitana de Cúcuta, manifestaron que la Sijín viene adelantando las medidas pertinentes para dar con el paradero del joven.
Por ahora, los operativos que han realizado dan muestra que han revisado la Terminal de Transporte terrestre de Cúcuta, 27 hoteles cercanos y tres empresas de transporte intermunicipal, sin ninguna pista hasta el momento.
La Policía e investigadores concentran la búsqueda en la frontera con Venezuela, sin embargo, piden a la comunidad que dé información del paradero de este joven una vez sea identificado. A través de la línea 123 o a través del número de WhatsApp 3143589350 los interesados pueden brindar información.
Investigan muerte de extranjero que pactó cita por redes sociales en Medellín
Un ciudadano vietnamita apareció sin vida en las calles de la capital de Antioquia tras ser víctima de un supuesto robo mediado por escopolamina; 24 horas antes del hallazgo, el hombre habría pactado un encuentro con una mujer a través de plataformas digitales.
La víctima fue identificada como Paul Nguyen, de 27 años, que también figura con una nacionalidad americana; arribó a esta región del país el pasado 6 de noviembre procedente de Estados Unidos en compañía de un amigo, con el objetivo de conocer la cultura paisa. Sin embargo, su paseó terminó en tragedia.
El pasado miércoles tomó la decisión de contactar a una mujer por medio de la red social de Tinder. Acordaron una cita en un establecimiento comercial del exclusivo barrio El Poblado. Al parecer, después de la cena, se trasladaron a otro sitio público de la zona rosa del barrio Laureles, otro sector concurrido de la ciudad.
De eso da cuenta su tarjeta de crédito, que registró varias transacciones. Además de los movimientos de dinero que hizo ese día, sus allegados tienen como pista una fotografía que compartió en su cuenta de Instagram con la mujer con la que habría compartido, también la última conexión que tuvo en WhatsApp.
El compañero con el que llegó a Colombia encendió las alarmas por su extraña desaparición. La Policía Nacional emprendió una búsqueda hasta que encontraron un cadáver en la zona urbana de la ciudad con las características físicas que describieron sus allegados cuando se reportó la misteriosa pérdida.
Las personas que estaban transitando por la carrera 91C y la calle 68E, en el sector conocido como El Cucaracho, notificaron a las autoridades a través de la línea de emergencia sobre la aparición de un cuerpo sin signos vitales que estaba acomodado a un pie de este corredor vial, en las inmediaciones del barrio Robledo.
Según el reporte que emitió la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, las unidades se dirigieron inmediatamente hacia las coordenadas descritas por la comunidad, donde confirmaron el hallazgo: un ciudadano sin vida estaba tendido sobre la calle, pero no portaba documentos que dieran cuenta de su identidad.
“La central de radio nos despacha un motivo de Policía en el cual hablan de una persona tendida en esa zona. De inmediato, nos dirigimos al lugar y, al llegar, observamos el cuerpo sin vida: contextura obesa, tez blanca, estatura aproximada de 1.80 metros”, se lee en el informe que escribieron los patrulleros.
Los actos urgentes se realizaron en la zona y luego se trasladó el cadáver hacia las instalaciones del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses en la capital de Antioquia. Hasta ese sitio llegó el amigo del ciudadano extranjero, donde dio cuenta de que el cuerpo sí correspondía a su identidad: Paul Nguyen.