La Personería Distrital de Medellín abrió una nueva indagación previa en contra de un funcionario de la Alcaldía de la ciudad por una denuncia que lo vincula, supuestamente, como emisor de conductas de acoso sexual en el ambiente laboral. El proceso se adelantará por medio de la vigilancia administrativa e instrucción disciplinaria.
De acuerdo con la información divulgada en las últimas horas, los hechos advertidos se habrían cometido al interior de las oficinas de la Secretaría de Hacienda, ubicadas en el centro de La Alpujarra. La mujer que encendió las alarmas se identificó ante esta agencia del Ministerio Público como una contratista activa de la misma dependencia.
Al parecer, antes de que el proceso llegara a las manos de la Personería, la víctima interpuso la queja ante la Secretaría de Evaluación y Control de la administración. En esa entidad entregó el nombre propio del personaje que la estaría afectando y describió las conductas que la llevan a asegurar que padeció acoso sexual en el trabajo.
Además, las denuncias se estarían tramitando en otros organismos de control con el fin de que el caso sea estudiado con rigurosidad. Julián Orlando Rendón, personero delegado para atender las situaciones que ameritan vigilancia e instrucción disciplinaria, señaló que el primer paso que dará es la apertura de una carpeta para analizar el terreno alertado.
“A raíz de las informaciones recibidas y conocidas por la Personería Distrital de Medellín, se decidió comenzar con la indagación para conocer los hechos que llevaron a la denuncia, individualizar de manera adecuada al funcionario presuntamente involucrado en la situación y conocer las acciones que se adelantaron desde la Alcaldía”, señaló.
Ahora bien, una vez superada esta etapa de la investigación, se procederá con base en el material probatorio recaudado durante las próximas semanas. Se podrían dar dos conclusiones. La primera, tomar la decisión de archivar el estudio porque no hay evidencias. Mientras que, en el otro caso, podría aprobar la investigación disciplinaria.
De acuerdo con los datos del Sistema de Información Estadístico, Delincuencial Contravencional y Operativo de la Policía Nacional, entre el primero de enero y el 30 de septiembre, en la capital de Antioquia se instauraron más de 1.450 denuncias por presuntos casos de violencias sexuales; hombres y mujeres están las listas.
Mientras que, por supuestas conductas de acoso sexual, esta institución tiene registradas en Medellín más de 224 alertas. En su mayoría, las víctimas son mujeres adolescentes y se cometen sin empleo de armas. Otros de los delitos más repetidos en esta ciudad son acceso carnal violento, pornografía infantil, actos y explotación sexual.
Para frenar este último delito, el alcalde Daniel Quintero Calle anunció hace unas semanas la recompensa de cien millones de pesos por información que ayude a identificar a las personas que estarían liderando la prostitución de menores de edad en la capital de Antioquia, recursos que estarían entregando las personas que patrocinan la falta.
“Por eso estamos trabajando para dar golpes contundentes. Por eso hemos puesto una recompensa de 100 millones de pesos a los que nos ayuden a identificar esos tipos y bandas, que no son tantas. Y si hay que subir la recompensa, la subimos”, afirmó Quintero Calle.
Las entidades del Ministerio Público han reiterado en varias oportunidades que la instrumentalización de niñas y adolescentes está disparada en los sectores más turísticos, sobre todo los ubicados en el exclusivo sector de El Poblado. Hasta esos sitios estarían llegando las víctimas donde los delincuentes las esperan en habitaciones adecuadas.
Ante esta situación, el distrito declaró el toque de queda nocturno para los menores de edad en los barrios donde se concentran las actividades de entretenimiento. Sin embargo, por medio de las redes sociales se ha denunciado que la medida impuesta por el mandatario no ha sido completamente acatada porque esta población sigue circulando en las calles.