Un joven de 22 años de edad fue asesinado cruelmente en el municipio de Bello, norte del Valle de Aburrá. El hombre de nacionalidad venezolana recibió más de 20 impactos de bala en diferentes partes de su cuerpo. Las autoridades afirmaron que la muerte del hombre identificado como Javier Madero Vásquez, es materia de investigación. Sin embargo, no descartan que se haya tratado de un caso de intolerancia.

“Estamos investigando, es un caso presuntamente asociado con intolerancia. Se conoció que la víctima llevaba varios meses viviendo en este barrio, La Nueva Jerusalén”, confirmó el coronel Henry Bello, subcomandante de la policía Metropolitana del Valle de Aburrá.

Un familiar de la víctima, a quién reservamos su identidad, contó que el hombre llevaba viviendo en ese sector de Bello cuatro años, durante los cuales no tuvo problemas con ninguna persona, no consumía sustancias estupefacientes y actualmente laboraba en una ferretería en barrio nuevo desde hace seis meses.

Con base en el Sistema de Información Estadística, Delincuencial, Contravencional y Operativa de la Policía Nacional, entre el 1 de enero y el 31 de octubre, en este municipio del Valle de Aburrá murieron violentamente 44 personas. En su mayoría, los homicidios se cometieron con armas de fuego y las víctimas fueron hombres.

Los asesinatos han estado acompañados de crudeza. Recientemente, Jean Carlos García y Jonathan Arley González aparecieron sin vida dentro de bolsas plásticas en Bello. Un grupo de delincuentes los secuestró y torturó. Las imágenes del sufrimiento que padecieron fueron compartidas con sus familias.

Pero el hallazgo que más estruendo hizo en este pueblo fue un par de pies humanos, arrumados junto a un fémur en un balde. Aunque un grupo especializado fue asignado para estudiar este caso, todavía no hay respuestas. Las otras partes del cadáver no aparecen en el Valle de Aburrá.

Otro caso

Un ciudadano vietnamita apareció sin vida en las calles de la capital de Antioquia tras ser víctima de un supuesto robo mediado por escopolamina. 24 horas antes del hallazgo, el hombre habría pactado un encuentro con una mujer a través de plataformas digitales.

La víctima fue identificada como Paul Nguyen, de 27 años, que también figura con una nacionalidad americana. Arribó a esta región del país el pasado 6 de noviembre procedente de Estados Unidos en compañía de un amigo, con el objetivo de conocer la cultura paisa. Sin embargo, su paseó terminó en tragedia.

Ambos salieron de Apartadó con destino a Medellín para encontrar mejores oportunidades. En el camino tropezaron. Los ilegales condicionaron su libertad a una millonaria suma de dinero, que sus parientes no alcanzaron a recolectar. Volvieron a saber de ellos cuando aparecieron en dos paquetes abandonados.

La misma trágica historia está escrita en los homicidios de Miguel Ángel Álvarez Zapata y David Ramiro Ramírez. Al parecer, fueron retenidos y lesionados hasta la muerte. Los dos fueron hallados en la parte trasera de una unidad residencial de Bello. Los vecinos los vieron enrollados en bolsas de color negro.

El pasado miércoles tomó la decisión de contactar a una mujer por medio de la red social de Tinder. Acordaron una cita en un establecimiento comercial del exclusivo barrio El Poblado. Al parecer, después de la cena, se trasladaron a otro sitio público de la zona rosa del barrio Laureles, otro sector concurrido de la ciudad.

De eso da cuenta su tarjeta de crédito, que registró varias transacciones. Además de los movimientos de dinero que hizo ese día, sus allegados tienen como pista una fotografía que compartió en su cuenta de Instagram con la mujer con la que habría compartido, también la última conexión que tuvo en WhatsApp.

El compañero con el que llegó a Colombia encendió las alarmas por su extraña desaparición. La Policía Nacional emprendió una búsqueda hasta que encontraron un cadáver en la zona urbana de la ciudad con las características físicas que describieron sus allegados cuando se reportó la misteriosa pérdida.

Las personas que estaban transitando por la carrera 91C y la calle 68E, en el sector conocido como El Cucaracho, notificaron a las autoridades a través de la línea de emergencia sobre la aparición de un cuerpo sin signos vitales que estaba acomodado a un pie de este corredor vial, en las inmediaciones del barrio Robledo.

Según el reporte que emitió la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, las unidades se dirigieron inmediatamente hacia las coordenadas descritas por la comunidad, donde confirmaron el hallazgo: un ciudadano sin vida estaba tendido sobre la calle, pero no portaba documentos que dieran cuenta de su identidad.