En la mañana de este miércoles se conoció una carta realizada por padres de familia del colegio alemán Deutsche Schule de Medellín, en la que expresaban su inconformidad con las directivas de la institución por admitir en el plantel a las hijas del hoy suspendido alcalde de la ciudad, Daniel Quintero.
En el escrito aseguraban que “les sorprendía la admisión de la familia de Quintero Osorio en el colegio (...) puesto que es evidente la contraposición de los valores y principios que la familia profesa y los distinguen”.
Entendiéndose que, “al colegio lo hace grande el que los niños sean buenos como producto indesligable de lo buenos que deben ser los principios profesados y practicados por las familias pertenecientes”, dice.
El trino por parte de Daniel Quintero no se hizo esperar. En su cuenta oficial de Twitter comentó que recibe este anuncio con “dolor en el alma”, mientras que su esposa Diana Osorio aseguró a SEMANA que aún no se han comunicado con el colegio, pero “es muy triste ver la división y el odio que comienza en la crianza”.
Sin embargo, en el comunicado los padres de familia expresan que no se trata de partidos políticos ni de posturas ideológicas, sino de su ‘fama’. “La familia Quintero Osorio se ha hecho públicamente famosa por atacar, descalificar, deshonrar y buscar destruir de manera sistemática y descarada, sin prueba alguna, toda estructura social y empresarial fundada en los grandes valores que durante años hemos admirado y de la cual nos sentimos inmensamente orgullosos”, continúan diciendo.
Respuesta del colegio
Al respecto, Anke Käding, rectora del Colegio Alemán, aseguró a SEMANA que su única finalidad es brindar educación de calidad como un derecho fundamental.
“Nuestra filosofía y los principios que orientan a la formación de nuestros estudiantes están asociados al pensamiento crítico, pluralismo, respeto por la diferencia y la democracia, somos un colegio apolítico”, comentó.
La directora precisó que frente a este caso, las estudiantes no serán expulsadas; por el contrario, esperan brindarles comodidad en los entornos educativos, al igual que a los demás niños, por lo que tienen a disposición un grupo de profesionales en psicología para atender las problemáticas que puedan presentarse. La institución resaltó su “creencia en valores de la democracia”.
“Respecto al caso de la familia Quintero no vamos a tomar una decisión, hasta ahora, porque creemos en nuestros valores y la democracia”, resaltó la directora.
El oficio termina diciendo que, “con la presente le manifestamos a la junta que en nuestro sentir, está la decisión que nos indigna y raya en una afrenta a la mayoría de familias que encontramos que lo que queremos inculcar en nuestros hijos se logra con una escala de valores diferente”.
No obstante, Käding recalcó que fue una minoría de padres los que hicieron este reclamo, en total 23. Vale la pena resaltar que las dos menores fueron admitidas, pero solo una se encuentra actualmente estudiando, pues el proceso de admisión dura alrededor de 2 años.
La menor ingresó en enero del presente año. La institución actualmente cuenta con 1.100 estudiantes.
Desde la institución enviarán esta tarde un comunicado en respuesta a la solicitud de los padres de familia. Mientras tanto, en redes sociales la comunidad ha manifestado su rechazo frente a esta lamentable situación, que Diana Osorio señaló como un acto de clasismo, fascismo, xenofobia y aporofobia. “Yo estoy segura de los valores liberales que quiero dejarles a mis hijas, ojalá el resto también”, dijo en su cuenta de Twitter.