Agentes especiales del gobierno de Estados Unidos le pusieron la lupa a una organización criminal que trafica anfetaminas en Medellín con el respaldo de ciudadanos americanos, ucranianos y holandeses. En las últimas horas, junto a la Policía Nacional, lograron restarle fuerza al temido grupo ilegal que amenaza la salud de los colombianos.

Las operaciones estarían siendo lideradas por alias El Doctor, un médico veterinario que cuenta con un laboratorio ubicado en la ciudad de Bogotá. Ese lugar sería utilizado por los delincuentes como fachada para realizar las actividades ilícitas. Además, él utilizaría su diploma para desviar el uso legal de medicamentos exclusivos para los animales.

Bajo la mira está la ketamina que, según el material probatorio, era entregada a personas que no cumplen con los requisitos establecidos por el Fondo Nacional de Estupefacientes para recibirla. Este producto es considerado como una droga disociativa con potencial alucinógeno. Es decir, con altas propiedades para actuar en el cuerpo como sedante.

Este elemento no se suministraba directamente, sino que sería utilizado como materia prima para la producción de drogas sintéticas. Los productos que supuestamente salían de esta conjugación eran 2CB, Tussi, Éxtasis, Endi y MDMA. De acuerdo con los cálculos de la Policía del Valle de Aburrá, las ganancias mensuales serían de 200 millones de pesos.

Los investigadores reconstruyeron los pasos de los integrantes de esta organización que eran visibles. Así las cosas, se concluyó que estos materiales nocivos para la salud eran comercializados presuntamente en las calles de los barrios de El Poblado, Laureles y Belén, pero también en los municipios de Itagüí, Sabaneta, Envigado y La Estrella.

“Los integrantes de esta red transnacional poseen contactos en Estados Unidos, Ucrania y Holanda para la consecución de manera ilícita de ketamina para su envío a Colombia con el fin de producir drogas sintéticas”, detalló la Policía Nacional.

Tuvieron que pasar 12 meses para que las autoridades pudieran encajar el rompecabezas del grupo que está instalado en el sur del Área Metropolitana del Valle de Aburrá. Dentro de las 154 acciones desplegadas se destacan actividades de inteligencia, búsqueda selectiva en bases de datos, entrevistas, vigilancias y seguimientos.

Con los elementos probatorios en mano, se logró que los organismos judiciales aprobaran siete órdenes de captura, las cuales se materializaron luego de la ejecución de nueve diligencias de allanamiento y registro en las ciudades de Medellín y Bogotá. También se adelantaron operativos en los municipios de Sabaneta y en Cota, Cundinamarca.

En primer lugar, fueron detenidos alias Andrés, de 31 años, y El Doctor, de 64 años, quienes figuran en el proceso como los supuestos cabecillas de la organización. Mientras que alias El Veterano y Víctor son considerados como los coordinadores. En la redada también cayeron alias Garra y Martha, señalados como presuntos integrantes del clan médico.

Todos eran requeridos por la Fiscalía General de la Nación por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. Además, en flagrancia, fue capturado un hombre de 31 años por las mismas faltas.

Bajo su poder encontraron materiales que son las piezas claves para unir el laberinto de la organización: 653 frascos de ketamina; 151 pastillas de medicamento amitriptilina; 11 pastillas éxtasis; 9 gramos de sustancia sintética ENDI; 1.135 gramos de marihuana; un arma tipo traumática tipo pistola; 2 proveedores y 57 cartuchos arma traumática; 5 memorias USB; 2′550.000 pesos y 95 dólares; y elementos tecnológicos que son analizados por los investigadores.

Alias Andrés también es requerido por autoridades del condado de Palm Beach, Florida, en Estados Unidos, por delitos sexuales, quien además de tener la doble nacionalidad, residió gran parte de su vida en Miami, donde, según la investigación, habría adquirido contactos con personas dedicadas al tráfico de drogas sintéticas. Todos fueron enviados a la cárcel.