Después de tres intentos, finalmente en el transcurso de este viernes, 22 de marzo, fue desalojada la casa museo del capo Pablo Escobar, uno de los hombres más sanguinarios en la historia de Colombia y el mundo entero. El inmueble, ubicado en el barrio El Poblado, en Medellín, era administrado por la familia del narco, incluido su hermano Roberto Escobar, más conocido con el alias de El Osito.
La operación fue realizada, ya que el sitio tenía una medida de extinción de dominio debido al presunto lavado de activos, según informaron las autoridades. El trabajo fue realizado por la Sociedad de Activos Especiales (SAE), la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, y entidades como la Personería de Medellín y el ICBF.
“Es relevante destacar que esta acción se dirige hacia la familia de Escobar, la cual mantenía ocupada la casa con objetos de valor pertenecientes al ex capo”, indicó la SAE por medio de un comunicado. La materialización de la medida de embargo fue llevada a cabo el pasado 19 de octubre.
La SAE fue la entidad encargada de expedir un acto administrativo que ordenó el ejercicio de facultades de policía administrativa que tiene como principal objetivo que la familia de Pablo Escobar retire de la casa todos los elementos que no fueron incluidos en la medida de extinción de dominio.
Con esta acción se desbarata el negocio que tenía la familia del capo colombiano, ya que este museo se había convertido en un destino turístico que era frecuentado por aquellos curiosos que se sentían atraídos por la vida que llevaba Escobar y deseaban conocer más sobre su vida. La casa está valorada en 12 mil millones de pesos.
“El inmueble fue originalmente propiedad del narcotraficante Pablo Emilio Escobar Gaviria, pero habría sido registrado a nombre de un testaferro. Actualmente, está bajo el dominio de Roberto de Jesús Escobar Gaviria, alias “El Osito”, hermano de Pablo Escobar, quien lo ha destinado como su residencia y un museo”, precisó la SAE.
Este procedimiento ya se había intentado realizar en otras dos oportunidades, pero la operación tuvo que ser suspendida. Ahora, según indicó la entidad, se llevará a cabo el retiro de muebles y enseres, transitoriamente, objetos que serán trasladados a la bodega de la SAE.
En cuanto a los vehículos que se encontraba allí, los mismos serán custodiados de manera temporal. “En este inmueble la Sociedad de Activos Especiales pretende crear un proyecto de resignificación del espacio”, agregó en el comunicado.
Las estrategias
La Fiscalía ha podido precisar, tras escuchar varios testimonios, que Roberto Escobar habría empleado diferentes estrategias con el objetivo de mantener el dominio del inmueble. Entre estas acciones, los testigos indican que el hermano del capo habría registrado la casa a nombre de terceros, pero quedó al descubierto debido a la falta de capacidad económica de los que aparecían como propietarios legales para adquirir la propiedad.
“El Gobierno del Cambio sostiene con determinación su compromiso con la recuperación de bienes obtenidos por manos de la mafia, destinando los bienes que antes se utilizaban en economías ilícitas para ser reintegrados al tejido socioeconómico para el beneficio colectivo”, mencionó la SAE.
Por último, la entidad reiteró que se compromete a seguir adoptando medidas contundentes y efectivas, además, de asegurar que los bienes mal habidos sean recuperados y puestos al servicio del desarrollo y el bienestar de la sociedad.