Daniel Quintero nuevamente fue protagonista en redes sociales este puente festivo luego de que anunciara que se iba a ausentar de la administración del distrito para tomarse un descanso junto a su familia el sábado, domingo y lunes.

Las vacaciones fueron duramente criticadas porque las tramitó once días después de retornar al cargo, inmediatamente la Procuraduría le levantó la medida de suspensión que lo alejó del Alcaldía por presunta participación en política a favor de Gustavo Petro.

Uno de los primeros en alzar la voz de rechazo por el descanso del mandatario fue el exconcejal del Centro Democrático y hoy aspirante a la Alcaldía de Medellín, Simón Molina.

“Quintero estuvo suspendido 41 días y regresó apenas hace menos de 2 semanas. ¿No tuvo tiempo suficiente para descansar? Seguro estaba muy ocupado interviniendo en política de manera ilegal”, afirmó el político que busca un puesto en el tarjetón de las próximas elecciones locales.

Lo mismo hicieron algunos veedores ciudadanos que le cuestionaron el agotamiento que tendría producto del activismo que habría tenido al interior de la campaña presidencial del Pacto Histórico, actuación que está siendo investigada por el ente de control disciplinario.

En el primer consejo de Gobierno de julio, que televisó el canal local Telemedellín, el alcalde dedicó varios minutos de la transmisión para responder a los comentarios que pusieron en tela de juicio su descanso, período en el que estuvo en encargo la secretaria de Gobierno, María Camila Villamizar Assaf.

Empezó diciendo que se tomó el fin de semana para vacacionar luego de que su hija de cuatro años le pidiera un tiempo para estar juntos, aprovechando el receso escolar de mitad del año.

Sin embargo, reconoció que la decisión no cayó bien. Sobre todo en las toldas del Centro Democrático, cuya posición fue interpretada por el alcalde como una novedad a razón del nivel de extrañeza que le tendrían.

“Me extrañan más de lo que yo creía, ni siquiera los puentes. Por ejemplo, otros gobernantes sacan diez y quince días de merecido descanso. Le agradezco a María Camila Villamizar que estuvo como alcaldesa encargada”, afirmó el mandatario.

A su juicio, ejercer cargos públicos es un sacrificio para las familias que los acompañan en el proceso de la gobernanza; en especial a los más pequeños, que ven la ausencia de los padres durante largo tiempo.

Daniel Quintero detalló que las jornadas laborales en la Alcaldía de Medellín empiezan a muy tempranas horas del día y terminan sobre las 11:00 p. m., donde muchas veces no se desconectan de los problemas de la ciudad.

“Obviamente, tener estas oportunidades [de descanso] es muy importante. Yo realmente pasé un buen fin de semana”, concluyó el alcalde, quien también aprovechó el fin de semana para denunciar una supuesta injerencia del Gobierno nacional que lidera Iván Duque para quedarse con ISA, Ecopetrol y la Comisión de Regulación de Energía y Gas, luego de terminar la administración el próximo 7 de agosto.

“Aquí empresas privadas se [tomaron] por 16 años a EPM abusando del gobierno corporativo y sin pagar un peso”, agregó a la comunicación que emitió durante sus cortas vacaciones a través de su cuenta de Twitter.

Durante la ausencia de Daniel Quintero, no hubo alteraciones de orden público en Medellín a excepción de doce personas que resultaron lesionadas en medio de la manifestación de la marcha por los derechos de la población LGBTIQ+, junto a la aplicación de cuatro comparendos por convivencia.

“Este puente fue una gran fiesta de la diversidad. El retorno y la salida del puente no tuvo ninguna novedad, todo estuvo en orden”, fue el reporte que le entregó la alcaldesa encargada a Daniel Quintero en medio de la transmisión de Telemedellín.