En la mañana de este jueves, se reportó una emboscada contra la Policía Nacional en el Urabá antioqueño. En medio de la emergencia, un miembro de la institución perdió la vida y otro más resultó herido. Las autoridades avanzan en las investigaciones.
El incidente ocurrió en el peaje de Mutatá. Allí se encontraban los dos oficiales de la Seccional de Transporte en un puesto de control, cuando fueron sorprendidos por sujetos de desconocidos que, en circunstancias que están siendo estudiadas, los atacaron violentamente.
La víctima mortal fue identificada como Darwin Lloreda Zúñiga, mientras que el patrullero Eduard Francisco Escobar fue trasladado a un centro hospitalario de la subregión, donde se recupera de las lesiones. Se espera un consejo de seguridad para esclarecer el hecho.
Así las cosas, en lo que va corrido del año, según el Ministerio de Defensa, en el departamento de Antioquia, se han cometido 23 ataques contra la Fuerza Pública. En esas emergencias, protagonizadas por grupos armados, han perdido la vida tres uniformados.
Procuraduría le pide explicaciones a la Policía Nacional por presunta prohibición de fusiles y armas largas
Continúa la polémica alrededor del documento que circuló al interior de la Policía Nacional en territorios vulnerables como el Cauca, en el cual se le prohibió a los activos de la institución utilizar armamento largo, a pesar de la fuerte presencia de las sanguinarias disidencias de las Farc en dichas regiones.
“Que las unidades bajo su mando no porten armamento largo cuando se movilicen patrullas de menos de 12 unidades”, dice el documento que circula de manera interna en la organización pública asignada a dicha zona del país.
Tras conocerse abiertamente lo anterior, el general Carlos Rojas insistió en que realmente no se ha tomado ninguna decisión que ponga en riesgo la vida de sus activos. Por el contrario, insistió en que su objetivo es nada más y nada menos que proteger a cada uniformado.
En ese sentido, el funcionario destacó que hubo una “mala interpretación” en el texto. No obstante, confirmó la veracidad del mismo.
“El día sábado, sobre tal vez las 8:00 p. m., luego de que se presentaron unos hechos, el comandante operativo imparte una instrucción a su equipo de trabajo de sacar un documento para que se generaran algunas acciones en materia de prevención. Y, efectivamente, este equipo envía un documento. Y aquí lo tengo para decirles que es una mala interpretación del documento”, explicó el oficial.
Por otro lado, aseveró: “Es mala interpretación desde el punto de vista de que nosotros contamos con unas directrices en cuanto a unas zonas, dos especialmente. El despliegue operacional que se tiene sobre algunos territorios. Y aquí efectivamente da a conocer y habla sobre el armamento largo y sobre las capacidades”.
El general hizo un resumen de los puntos en los que ―según él― hubo un error en la interpretación, intentando aclarar la finalidad de la misiva en cuestión. De la misma manera, la Fuerza Pública admitió una falla en el texto.
“Yo quiero resumirlo de la siguiente manera, aunque el documento en ningún momento habla específicamente del territorio, sino habla de manera general, es simplemente explicarle que la instrucción que tenemos nosotros es que a las áreas rurales lo único que se tiene con ello es, primero, las medidas, el desplazamiento y, tercero, a que más de 10 hombres, especialmente para las zonas rurales, se deba llevar y se va a cumplir esto”, añadió ante los medios de comunicación.
No en tanto, a pesar de lo comentado por el oficial de mando, la Procuraduría General de la Nación solicitó explicaciones a la Policía Nacional por la presunta prohibición del uso del armamento largo en el Cauca.