Alias ‘Martín’ cargaba 450 millones de pesos en alhajas cuando fue detenido por la Policía Nacional en el aeropuerto internacional José María Córdova de Rionegro. Él tiene una investigación por supuestos nexos con las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC).
El paisa de 36 años tomó un avión hacia Turquía para celebrar su cumpleaños por lo alto junto a su familia y, una vez retornó, fue atrapado por investigadores de la Dijín por los presuntos delitos de concierto para delinquir y tráfico de drogas ilícitas.
En medio del procedimiento, se le incautaron varias joyas, relojes, gafas, gorras y otras prendas que sumarían 450 millones de pesos. Mientras que en su pasaporte están marcados los viajes que emprendió en los últimos meses por todo el mundo.
El expediente
Las prestigiosas relaciones internacionales darían cuenta de un supuesto negocio criminal que tendría la misión de coordinar la venta de estupefacientes y las rutas del narcotráfico. Sus visitas llamaron la atención en Europa, Centroamérica y Estados Unidos.
Según la investigación, este sujeto sería el hombre de confianza de alias Chiquito Malo y tendría el visto bueno del Estado Mayor del Clan del Golfo para hacer envíos de drogas en contenedores y lanchas rápidas desde embarcaderos del Urabá antioqueño.
Se sospecha que logró sacar hasta 30 toneladas de clorhidrato de cocaína hacia diferentes países, por lo que fue calificado como uno de los objetivos de alto valor para la DEA y pedido en extradición para que responda ante la Corte Distrital Este de Texas.
Su vida
Otro de los datos trascendentes del expediente es que, presuntamente, alias ‘Martín’ habría tenido una relación estrecha en 2021 con los hoy extraditados Carlos Antonio Moreno Tuberquita, Jorge Eliécer Castaño Toro y Darwin Abad Sierra, con quienes habría negociado.
Él estuvo vinculado a un proceso por presunto homicidio donde salió bien librado porque se habría dado en legítima defensa, según el juez. También sufrió un atentado y tenía un riguroso esquema de seguridad tras las amenazas que habría recibido.
En Medellín llevaba una vida de lujos que hoy pasan por la lupa de las autoridades, no solo colombianas, también estadounidenses, quienes aportaron información trascedente para oficiar su detención en las últimas horas en la principal terminal aérea de Antioquia.
Cayó narco
Moreed Noor aterrizó en Medellín en 2018 proveniente de Australia y, durante seis años, edificó una vida de multimillonario que llamó la atención de las autoridades. Cuando se les puso la lupa a sus finanzas, quedó al descubierto una supuesta red ilegal.
Al parecer, con el lavado de activos y concierto para delinquir, multiplicó la economía del hogar que construyó con una ciudadana colombiana y alcanzó a favorecer a sus allegados, quienes formalizaron varias empresas para darle apariencia legal a la plata.
Una vez la Fiscalía recopiló el material probatorio para judicializarlo por los presuntos delitos, los investigadores inspeccionaron la residencia que el capo adquirió en un exclusivo sector de la ciudad y se llevaron una gran sorpresa por las excentricidades.
El extranjero tenía un ascensor, piscina, polígono y un cuarto de pánico. También 70.000 dólares americanos, 398 millones de pesos y 4.055 dólares australianos. Paralelamente, celulares, discos duros y computadores con documentos valiosos.
En la lista de sus bienes aparecen tres sociedades, una embarcación, tres residencias y automotores, once de ellos son vehículos de alta gama y maquinaria amarilla. Todo esto fue avaluado por las autoridades, preliminarmente, en 3.700 millones de pesos.
Mientras avanzan las investigaciones en contra de alias Robin, como distinguirían al australiano, las propiedades serán administradas por la Sociedad de Activos Especiales y el Fondo Especial de la Fiscalía, tal como lo indican sus competencias.