Un hombre apareció muerto con varios signos de violencia en Medellín en un supuesto caso de justicia por mano propia. Al parecer, un cartel amarrado a su cuerpo daría a entender un ajusto de cuentas que es investigado por la Policía y la Fiscalía.
Su identidad sigue siendo un misterio. Las autoridades reseñaron que, en la mañana de este viernes, 5 de mayo, recibieron una llamada telefónica donde un ciudadano advirtió sobre el hallazgo de un cadáver en el sector conocido como Fuente Clara.
De inmediato se desplazaron las patrullas que confirmaron la emergencia y entregaron detalles de la situación: la víctima estaba sin signos vitales y atado de las manos junto a un escalofriante mensaje fijado en el tórax: “Muerte por violo (sic) los niños no se tocan”.
El informe preliminar suministrado por la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá indicó que el sujeto presentaba varios golpes en diferentes partes de su cuerpo. Además, alcanzaron a ver una herida en su estómago ocasionada por un arma cortopunzante.
Se avanza en los estudios judiciales para establecer su nombre y dar con el paradero de las personas que le provocaron la muerte. En lo que va corrido de este año, en la capital de Antioquia se han presentado 118 homicidios, trece menos que los ocurridos en 2022.
Los investigadores ya tienen certeza del 50 por ciento de los crímenes. La mayoría tienen relación con las operaciones delincuenciales de las estructuras ilegales (30 casos), luego están los que desencadenan las faltas de convivencia (21 casos) y robos (10 casos).
Por otro lado, un hombre de nacionalidad argentina perdió la vida en extrañas circunstancias al interior de un exclusivo hotel del barrio El Poblado de Medellín. Las autoridades abrieron una investigación para esclarecer el hecho y ya se tiene una hipótesis de lo sucedido.
A la 1:30 de la tarde del pasado lunes 1 de mayo la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá fue advertida sobre el hallazgo de un cadáver en una habitación del establecimiento, ubicado en el sector de Castropol. De inmediato se desplazaron a la zona referenciada.
Cuando los uniformados arribaron, una empleada relató que había ingresado al cuarto para realizar el respectivo aseo y se enfrentó a la estremecedora escena: el hombre no tenía signos vitales y estaba bañado en sangre, por lo que alertó a las autoridades.
Uno de los oficiales que acompañó la inspección narró: “Subimos y verificamos dicha información en compañía del vigilante del hotel. Al llegar al sitio, identificamos un cuerpo de sexo masculino y un lago hemático en diferentes partes de la habitación”.
Es decir, sangre en varios puntos del inmueble producto de lesiones con arma blanca. Al parecer, él mismo se habría generado las heridas dado que ninguna persona cruzó la puerta del cuarto desde el 30 de abril, el último día que lo vieron con vida en los pasillos.
Ahora bien, la víctima de 31 años fue identificada como Óscar Marecos y habría llegado a la capital de Antioquia 96 horas antes del suceso. El registro de las cámaras de seguridad y el material probatorio recopilado en el hotel llevó a los uniformados a una conclusión.
Toma fuerza la hipótesis de un “suicidio con arma cortopunzante”. Sin embargo, la Fiscalía General de la Nación puso la lupa sobre los hallazgos y será determinante el informe que presente el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
Esta misma entidad reveló que, entre los meses de enero y febrero de 2023, en la ciudad de Medellín atendieron 38 casos con características similares. Si se compara con el mismo período de 2022, hay un aumento de nueve fallecidos producto de autolesiones.