El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía recuperó el cadáver de un hombre que fue abandonado en la autopista Medellín – Bogotá. Según las primeras indagaciones, los restos mortales serían de un ingeniero que fue reportado como desaparecido.
Una llamada telefónica puso en evidencia la tragedia: una persona se comunicó con la línea de emergencia y contó que tenía frente a él un cuerpo sin vida que estaba tendido a un costado de la carretera, en las inmediaciones de la vereda Peñolsito de Copacabana.
Las autoridades se desplazaron hasta el lugar referenciado por el informante y confirmaron el macabro hallazgo en este importe eje vial. Este sujeto tenía una bolsa blanca en la cabeza que, a su vez, cubrió el papel vinipel con el que envolvieron su rostro.
Los restos del sujeto fueron trasladados a la sede del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, donde se están estableciendo las causas de su muerte. Se anticipó que tenía marcas violentas en algunas partes del cuerpo.
Al parecer, correspondería a David López Gaviria, un ingeniero agroindustrial de 28 años que fue reportado como desaparecido desde el pasado 31 de enero en el municipio de El Carmen de Viboral, ubicado en el oriente del departamento de Antioquia.
Sus allegados lo buscaron con insistencia en varias poblaciones de la subregión y divulgaron panfletos con su fotografía en redes sociales. Allí se aclaró que la última vez que lo vieron con vida estaba montado en una motocicleta de alto cilindraje en la zona.
También se confirmó la aparición de un sujeto de 31 años en la zona rural del corregimiento de San Antonio de Prado, en la ciudad de Medellín, quien se encontraba desaparecido desde el 30 de enero en el mismo sector. Su cuerpo se encontraba envuelto en un costal.
Con base en las estadísticas del Sistema de Información para la Seguridad y Convivencia, en lo que va corrido de 2024, cerca de 28 personas han muerto de manera violenta en la ciudad. Frente al 2023, hay una disminución del 17 % en los crímenes.
Los asesinatos están relacionados con robos a mano armada (4 casos), intervención de los grupos delincuenciales (4 casos), actos de intolerancia (5 casos), violencia de género (2 casos) y violencia intrafamiliar (1 caso), con base en las primeras indagaciones de la Fiscalía.
Por otro lado, dos ciudadanos extranjeros, oriundos de Estados Unidos, perdieron la vida este fin de semana en la ciudad de Medellín. SEMANA conoció las primeras pistas que rastrean la Fiscalía General de la Nación y la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
El primer episodio ocurrió el pasado 3 de febrero en el barrio El Poblado, cuando los vigilantes de un edificio hallaron un cadáver tendido sobre el suelo. Se trataba del cuerpo de Manley Mark Conlen, de 37 años, quien estaba hospedado allí desde el 22 de diciembre.
En el expediente judicial se reseñó que el hombre rentó un apartamento por medio de la aplicación Airbnb. Al menos por doce horas no lo vieron salir ni entrar a la residencia. Solo fue en la madrugada del sábado cuando lo observaron nuevamente.
El hecho fue dramático: el hombre cayó desde el piso 17 a las 00:54. Una hora después, los oficiales se enteraron del caso. “Al parecer, la víctima se encontraba solo en el inmueble. Se desconocen las causas de su lanzamiento”, reportaron las autoridades.
El segundo caso tuvo lugar en un reconocido hotel del barrio Laureles en la madrugada del 4 de febrero. Los testigos indicaron que Anthony López, de 29 años, ingresó a su habitación acompañado de dos mujeres en aparente estado de embriaguez.
Minutos después, las dos damas salieron solas del lugar. Él fue encontrado sin signos vitales en el cuarto y un empleado encendió las alarmas. De manera preliminar, los detectives aseguraron que el cuerpo no tenía marcas violentas.