Las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) son los principales sospechosos de las dos masacres que estremecieron a Santa Fe de Antioquia el pasado domingo 3 de diciembre. Tras las investigaciones, la Policía Nacional reveló la identidad de los seis fallecidos y ofreció una millonaria recompensa para dar con el paradero de los responsables.
La hipótesis principal es que las víctimas mortales integraban una organización delincuencial que pretendía incursionar en el occidente del departamento y, supuestamente, se habrían apoderado de una parte del oro extraído ilegalmente por las AGC. Al parecer, los crímenes se dieron en medio de un ajuste de cuentas.
Los cadáveres aparecieron con marcas violentas y tendidos sobre las carreteras terciarias del municipio. En imágenes que circularon en las redes sociales se alcanzaron a observar varios impactos de bala y los investigadores judiciales hallaron signos de tortura que, inicialmente, darían cuenta de la crudeza en que ocurrieron los hechos.
Identidad de las víctimas de masacres en Santa Fe de Antioquia
Cinco de ellos fueron identificados con certeza en las últimas horas y las autoridades encontraron varios puntos en común: eran oriundos del Caribe colombiano y cargaban con expedientes judiciales por varios delitos. Sus cuerpos permanecen bajo custodia de la Fiscalía General de la Nación y se está a la espera de que sus parientes reclamen los restos.
Justo Aquiles Gamboa Gómez, de 40 años, nació La Guajira y acumuló cinco anotaciones en calidad de indiciado por hurto calificado, concierto para delinquir y porte ilegal de arma de fuego. Yovadys Solorzano Bustamante, de 49 años, era del municipio de Magangué, Bolívar, y no registra ningún tipo de notas en el Sistema Penal Oral Acusatorio.
Mientras que Andy Baldovino Rodas, de 32 años, era del departamento de Sucre y tenía procesos por supuestos hurtos cometidos en su región. Lucelis Yohana Correa Galvis, de 17 años, también se crio en Magangué y tenía varias investigaciones activas por diversas estafas, supuesto daño en bien ajeno y presunto tráfico de drogas.
El quinto fue Luis Francisco Matos Cuello, de 32 años, de Regidor, en Bolívar. Él está en calidad de indiciado en casos de concierto para delinquir agravado por extorsión, falsedad en documento público y rebelión. El último fallecido sería un ciudadano venezolano que respondía al nombre de Guiovanys José Suárez Linares, aunque no hay certeza.
¿Quiénes son los responsables de las masacres?
La Policía Nacional y la Fiscalía creen que detrás de las masacres estaría alias Zarco Tigre, un supuesto integrante del Clan del Golfo que opera en el municipio de Santa Fe de Antioquia. Por información certera que facilite su judicialización, la Gobernación está dispuesta a entregar una recompensa de hasta 30 millones de pesos.
Por otro lado, se entregarán 100 millones de pesos por los datos que ayuden a ubicar a alias Richard, el principal cabecilla del Bloque Central Urabá de las AGC; por alias Rayo, líder de la subestructura Edwin Román Velásquez Valle, la misma cantidad de dinero; mientras que por alias Mono Gringo serán 30 millones de pesos.
El secretario de Seguridad y Justicia, Oswaldo Zapata, indicó que todos son señalados de dinamizar la violencia en el departamento, además de las economías ilícitas que impulsan en el territorio. Ante la amenaza que representan, ordenó desplegar a la fuerza pública en las principales avenidas de la subregión, cascos urbanos y zonas rurales.
“Por supuesto, continúan las operaciones militares y policiales contra el Clan del Golfo, tanto en el occidente como en el resto de las zonas del departamento donde tienen injerencia criminal. El compromiso es seguir fortaleciendo la alianza entre las administraciones municipales, el departamental y organismos de seguridad”, dijo Zapata.