El Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Medellín informó que la segunda temporada de lluvias ya arrancó y las precipitaciones se pueden extender hasta noviembre.
Según el pronóstico, la intensidad y la frecuencia serán menores a los episodios experimentados en los últimos años. Sin embargo, se recomendó no bajar la guardia y evitar cualquier tipo de incidentes.
La diferencia de este período es que está influenciado por el fenómeno del Niño. Esto no quiere decir que no se van a presentar descargas de agua, al contrario, pueden ocurrir eventos extremos.
Así lo explicó la directora de Gestión del Riesgo de la capital de Antioquia, Laura Duarte: “Vamos a tener una disminución en los acumulados de lluvia y en la frecuencia en la que llueve. Vamos a tener episodios de lluvia”.
Por el cambio climático, se esperan días con mucho calor y sequía completa; aunque también se darían momentos en que las precipitaciones no dejen de caer con acumulados muy altos.
“Les invito a no bajar la guardia, a tener presentes las recomendaciones que les hemos dado de temporada de lluvias: limpiar canales, desagües y drenajes para que no se vaya a represar el agua y reportar todos los incidentes”, agregó Duarte.
De igual manera, evitar ingresar a las quebradas o las zonas aledañas a los afluentes dado que, cuando llueve, puede presentarse incremento repentino en los caudales e inundaciones.
Tampoco obstruir los cauces con basuras o materiales que comprometan su capacidad hidráulica ni mucho menos transitar por las vías inundadas porque podrían ocurrir nuevas emergencias.
En lo corrido del año, los organismos de socorro han atendido 1.014 incidentes relacionadas con lluvias en Medellín: 767 desplome de árboles, 137 movimientos en masa y 110 inundaciones.
Estos son los barrios de Medellín donde hace más calor
Las altas temperaturas están generando islas de calor en la capital de Antioquia y el observatorio de medio ambiente de la Personería reveló la lista de los ocho barrios en los que se siente este fenómeno con mayor intensidad. Hay alerta por las consecuencias.
Según los expertos del Ministerio Público, el termómetro está disparado por la falta de arborización y coberturas vegetales en los sectores de Guayabal, Girardot, Francisco Antonio Zea, Alfonso López, Héctor Abad Gómez, La Toscana, Robledo y Castilla.
También tendría relación con el aumento de la temperatura global de 1.5 %, de acuerdo con el informe de actualización climática presentado por la Organización Meteorológica Mundial, y el fenómeno del niño que está azotando al continente.
Este escenario podría general problemas en la salud de los ciudadanos, especialmente en los adultos mayores y los niños: “Los efectos de las islas de calor urbano afectan la calidad de vida de las personas y su derecho a un medio ambiente sano”, relató la Personería.
En ese orden de ideas, recomendó tomar medidas de precaución para mitigar los riesgos, no talar árboles, cuidar las fuentes hídricas, no arrojar residuos, evitar fogatas en zonas abiertas para esquivar las conflagraciones y, finalmente, hidratarse constantemente.
Mientras que a las autoridades pidió “acciones de adaptación, mitigación y prevención de las islas de calor, haciendo recomendaciones a los actores sociales a no realizar desmonte de la cobertura vegetal, fomentar la construcción sostenible y plantar árboles”.
Aunque el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Medellín activó un plan de contingencia ante el incremento de incendios de cobertura vegetal.