La Alcaldía de Medellín destinó a un grupo especializado de visualizadores del Sistema Integrado de Seguridad y Emergencias para hacerle seguimiento a las personas que arrojan basuras y escombros en lugares prohibidos.
Desde enero, este equipo puso en evidencia a 97 infractores que dejaban los materiales en el espacio público. Todas las escenas quedaron registradas en las cámaras inteligentes y las imágenes han servido para penalizar a los protagonistas.
Un informe publicado por la administración distrital detalló que, gracias a la medida, se inmovilizaron cinco vehículos que fueron utilizados para descargar escombros en las calles, entre ellos tres motos cargueras y dos motocicletas.
Aparte del comparendo de movilidad y el pago de parqueadero en los patios, también se les sumó una sanción de tipo cuatro, según el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, que pueden superar los dos millones de pesos.
Las comunas donde tiran estos materiales con mayor frecuencia son La Candelaria, Aranjuez, Belén y Guayabal. Las autoridades tienen la lupa puesta sobre sus barrios para frenar el uso irregular de las avenidas.
“Con la articulación de la Policía Metropolitana, se ejercen controles alrededor de siete puntos que se determinaron como los de mayor afectación por estos comportamientos”, afirmó la Secretaría de Seguridad y Convivencia.
En medio de esas inspecciones, se han incautado 81 armas cortopunzantes, 44 registros e impuesto 79 comparendos. La guardia no se bajará y se reforzará la estrategia que busca que la capital de Antioquia sea una ‘tacita de plata’.
Por otro lado, es importante recordar que la Alcaldía de Medellín activó un nuevo servicio en la recolección de residuos para limpiar el espacio público y evitar la generación de inundaciones en las temporadas de lluvias, escenario que amenazó a la ciudad durante el último período de fuertes precipitaciones.
De acuerdo con los planes divulgados, la medida rige desde el primero de abril en las comunas de Castilla y Guayabal. Después de dos meses, arrancará en los demás sectores de manera periódica, con el fin de garantizar el 100 % de la cobertura distrital.
Los funcionarios recibirán de manera escalonada escombros, muebles y enseres sin ningún costo. Cada casa tendrá el derecho de entregar hasta quince bultos anuales, bajo la iniciativa del “mínimo vital de escombros”, como lo bautizó el alcalde Daniel Quintero.
“Queremos que nunca más haya un colchón en una quebrada, que nunca más vuelva a haber inundaciones porque una quebrada estaba obstaculizada. Muchas familias sacan el colchón, no tienen plata para que se los recojan y terminan en la quebrada”, aseguró.
Vale la pena decir que, actualmente, este servicio tiene un costo de $50.000 a cambio de quince bultos de escombros. Mientras que enviar al basurero un colchón está valiendo $62.000. Así las cosas, los hogares podrán tener un ahorro importante en sus finanzas.
¿Cómo funcionará?
La Alcaldía de la capital de Antioquia, por medio de la Secretaría de Medio Ambiente, contratará a los motococheros que quieran hacer parte del proyecto, cuyo control estará en las manos de Empresas Varias de Medellín, que hace parte del Grupo de EPM.
Desde allí se liderará la parte logística y operativa con la generación de las solicitudes de los ciudadanos, la coordinación para la recolección en la puerta de cada residencia y la disposición final responsable de los escombros, muebles y enseres suministrados.
Para la solicitud del servicio gratuito, se contará con los canales de atención de Emvarias como la línea amiga del aseo (604) 444 56 36. Además, para los usuarios de la compañía de servicios públicos, hay una nueva Línea de WhatsApp: 304 4037188.
Aunque será un gran beneficio para las comunidades, las autoridades también endurecerán las sanciones para el ciudadano que sea sorprendido, arrojando residuos de construcción y demolición en los sectores prohibidos. La Policía Nacional estará atenta.