La Fiscalía desmanteló una organización delincuencial que estafó a numerosos adultos mayores en Medellín y Antioquia a cambio de deshacer supuestas maldiciones en su contra. Al parecer, recibieron más de mil millones de pesos.
La investigación del CTI pone en evidencia que, supuestamente, un hombre usó un espacio radial de esoterismo para captar a las víctimas y hacerles creer que estaban bajo los efectos de la brujería en los últimos siete años.
En un audio se escuchó la pretensión del líder: “Yo quiero hacer un programa esotérico camuflado. O sea, que la gente cuando llame, se le puede hablar de la bruja normal, decirle: ‘Lo suyo es una fuerza negativa, le han hecho un mal, lo suyo es un trabajo’”.
Ellos diseñaron una estrategia para ganarse la confianza de las víctimas y así poder ingresar a sus propiedades, donde aprovechaban los descuidos para sembrar en la tierra cofres y amuletos, creando escenarios perturbadores para reforzar el engaño.
En medio de la actuación, les daban indicaciones a los adultos mayores para que rastrearan en sus viviendas los falsos entierros, lo que se traducía en temor e incertidumbre para que accedieran a sus servicios.
Los delincuentes les habrían cobrado altas sumas de dinero a las víctimas para superar los supuestos maleficios y les daban un número con el que les aseguraban que podían ganarse la lotería. Las maniobras también fueron detectadas en otro audio.
En una conversación con una mujer, uno de ellos le comentó: “Había un muñeco que tocó destruir, por eso yo dije que la llamaba. Me tocó trabajar toda la noche, destruir todas esas cosas. Hay que mandar a hacer misas, necesita unas cremas”.
En el expediente hay una historia inquietante: una de las personas habría pagado hasta 30 millones de pesos para realizar misas en la sede papal de Roma. Además, se sospecha que tres ciudadanos vendieron sus casas a los delincuentes sin recibir dinero por ellas.
“Los hechos ocurrieron en Medellín y en Rionegro, La Ceja, La Unión, Abejorral, El Carmen de Viboral e Itagüí. Durante el periodo en que habrían incurrido en las estafas, se cree que la red ilegal obtuvo ganancias superiores a los 1.000 millones”, dijo la Fiscalía.
Cuatro personas fueron imputadas por concierto para delinquir y estafa agravada en la modalidad de delito en masa, aunque ninguno se allanó a las responsabilidades señaladas por el ente de acusación. Por decisión del juez del caso, los investigados no fueron privados de la libertad y deberán demostrar buena conducta, presentarse cuando sean requeridos por la justicia y no podrán salir del país, ni seguir ejerciendo actividades de esoterismo.
El líder “no podrá asistir a la emisora y deberá anular cualquier mensaje radial en el que se anuncien tratamientos curativos o relacionados con el esoterismo. La Fiscalía apeló la decisión por considerar que en este caso sí es procedente una medida privativa de la libertad”, se lee en un comunicado de prensa.