Las autoridades del Valle de Aburrá están dispuestas a entregar 200 millones de pesos por información que conduzca a identificar el paradero de los hombres que asesinaron a los patrulleros Andrés Camilo Andrade y Geovanny Alcalá en zona rural de Bello, Antioquia.

De acuerdo con el reporte de la Policía Metropolitana, cuatro personas llegaron en motocicletas hasta un establecimiento comercial ubicado en el corregimiento San Félix, donde los dos uniformados estaban desayunando.

Los delincuentes arremetieron contra ellos con disparos y una granada. En la cámara de seguridad del restaurante quedó registrada la fatal escena: un delincuente accionó su arma de fuego mientras los otros clientes huían de las balas que no pudieron esquivar los policías.

En las imágenes también quedaron captadas las matrículas de las motos que se utilizaron para cometer el delito. Luego de activar el plan de investigación urgente, las unidades de inteligencia de la Policía de la subregión lograron hallarlas en una vivienda.

Además, en esa inspección lograron capturar a dos personas que podrían tener relación con el hecho, dado que estaban dentro del hogar donde inmovilizaron las motocicletas que figuraron en las cámaras de vigilancia.

Los estudios realizados en las últimas horas dan cuenta que los delincuentes estarían asociados a un grupo armado organizado que tiene despliegue en el Valle de Aburrá y que cuenta con las capacidades económicas para financiar sicarios con conocimientos en explosivos.

Se presume que sean del Clan del Golfo que, a propósito, ordenó activar en las últimas semanas un plan pistola contra los miembros de la fuerza pública en los departamentos de Antioquia, Chocó y Córdoba. En consecuencia, más de 12 policías y militares han muerto violentamente.

Para agilizar la identificación de los ilegales que asesinaron a los patrulleros Andrés Camilo Andrade y Geovanny Alcalá, la Alcaldía de Bello y la Policía Nacional sacarán de su cartera una gran cantidad de dinero con el fin de que la comunidad los delate.

“Conjuntamente con la Policía, ofrecemos una recompensa de hasta 200 millones de pesos para quienes nos den la información y dar con los autores de este vil crimen. A los familiares de nuestros patrulleros, toda nuestra solidaridad”, afirmó el alcalde local, Óscar Andrés Pérez Muñoz.

Él advirtió que en la mañana de este lunes 18 de julio se llevará a cabo un consejo de seguridad extraordinario para blindar a las autoridades ante cualquier acto terrorista en esta zona del municipio, donde comparte frontera con San Pedro de los Milagros y San Jerónimo.

Por otro lado, a raíz de los recientes atentados contra los miembros de la Policía en los municipios del occidente y Urabá antioqueño, el director de la institución, general Jorge Luis Vargas Valencia, pidió activar un plan urgente para hacerles contra peso a los delincuentes.

“El general Vargas ordenó el desplazamiento a la región del mayor general Fernando Murillo, director de la Dijín y quien tiene a su cargo la operación Cóndor contra el Clan del Golfo”, informó la Policía Nacional en un comunicado dirigido a la opinión pública.

Él tendrá la obligación de establecer operaciones contundentes para ubicar y capturar a alias Richard, cabecilla de esa organización ilegal y quien estaría ordenando los homicidios sistemáticos contra los hombres de la Policía en Antioquia.

Recientemente, el Ministerio de Defensa aumentó la recompensa para hallar a este sujeto que tiene a cargo los brazos económicos y sicariales del Clan del Golfo. Por él, el Estado está dispuesto a pagar otros 200 millones de pesos.

Según los grupos de inteligencia, alias Richard es el autor material del último ataque que se cometió en el municipio de Cañasgordas, que terminó con la vida del patrullero Sergio Orlando Vergara Atehortúa y de un ciudadano, y que dejó a cuatro uniformados más heridos.