El alcalde distrital de Medellín, Daniel Quintero, lanzó una dura advertencia a través de sus redes sociales, luego de los desmanes protagonizados por un grupo de aficionados en el estadio de fútbol Atanasio Girardot.
Este domingo,16 de abril, se tenía previsto el encuentro deportivo entre Atlético Nacional y América de Cali, pero antes de la contienda los hinchas del cuadro verdolaga se fueron a los disturbios.
Al parecer, no estaban de acuerdo con algunas decisiones que se tomaron desde la directiva del equipo, relacionadas con el precio y la venta de boletas. Por consiguiente, se enfrentaron con la Policía y miembros del Esmad. Al menos 11 uniformados y 13 ciudadanos resultaron lesionados.
“No vamos a tolerar la violencia. Me toca poner hasta 800 policías por cada partido. No prestaremos el estadio a Nacional hasta que no se acuerden condiciones mínimas de seguridad entre barra y directivas, y la vigilancia sea pagada por el equipo. Prefiero a los policías cuidando a la gente en las calles”, trinó el mandatario Daniel Quintero.
Debido a estos hechos, el Metro de Medellín suspendió la prestación del servicio en la estación Estadio. La línea B opera entre San Antonio y San Javier, sin hacer parada en esta estación.
“Muy triste que esto se dé de esta manera y que una hinchada perjudique tanto al fútbol y a su equipo. Sé que hay disturbios complejos fuera del estadio y que en la tribuna sur también. He hablado con la oficial de seguridad y los delegados de los equipos para saber las condiciones. Lamentable lo que pasa y no arriesgaremos integridad de nadie”, dijo el presidente de la Dimayor, Fernando Jaramillo.
La Policía advirtió que no hay garantías para el juego y por eso se cerraron las puertas del escenario deportivo y ordenaron la evacuación de los presentes en las gradas.
La administración distrital, en articulación con la Policía Metropolitana y demás autoridades, dispusieron de 800 policías y el puesto de Mando Unificado en el escenario deportivo. No obstante, con los actos ocurridos en las últimas horas, no se registran condiciones para tener un partido en tranquilidad.
“Ellos son los que tienen la experiencia y responsabilidad y son los que pueden evaluar de primera mano. El juego no se va a dar esta noche”, aseguró el máximo dirigente del fútbol profesional colombiano.
En vivo y en directo, el presidente confirmó que tras firmarse el acta por parte de los equipos que aprueba el aplazamiento del juego, este se llevará a cabo el lunes 17 de abril a las 10:00 a. m. en el máximo escenario deportivo de los antioqueños.
“Esperamos que mañana. El problema de fechas es muy complejo y se debe hacer mañana a puerta cerrada. Mañana a las 10:00 a. m.”, indicó Jaramillo.
Juan Pablo Ramírez, secretario de Gobierno de la alcaldía de Medellín, culpó a Atlético Nacional y responsabilizó a sus dirigentes de los hechos violentos.
“Una noche muy desafortunada para el fútbol en la ciudad. Rechazamos la violencia, pero queremos que quede muy claro y que se establezca la responsabilidad de los directivos del club en estos destrozos, en las lesiones de los policías, jóvenes ensangrentados por la renuencia de un club de escuchar a su hinchada. Con su actitud generaron esto. Rechazo también la violencia de los hinchas y vamos a identificar quienes causaron los destrozos”, dijo Juan Pablo Ramírez, secretario de Gobierno de la Alcaldía de Medellín.
Mauricio Navarro, presidente de la institución verdolaga, salió en defensa de la institución y aclaró que la alcaldía de Medellín los invitó para tener un diálogo que consideraron “sesgado”, porque según argumentan desde la administración de Daniel Quintero, apoyan la barra en mención.