El Metro de Medellín presentó una alternativa para recargar la tarjeta cívica sin la necesidad de hacer filas y entregar dinero en efectivo, un dolor de cabeza para algunos usuarios que usan las diferentes líneas de transporte en el Valle de Aburrá.

Se presume que un millón de personas de la subregión se beneficiarán con la nueva opción de pago que gestionó la compañía junto a la aplicación digital de DaviPlata, cuyo trámite es similar al que se realiza en otras entidades bancarias aliadas al sistema.

El propósito de la medida es facilitar el día a día de las personas y responder de manera efectiva a las necesidades de los clientes. De acuerdo con los cálculos oficiales, cerca de 2,5 millones de ciudadanos hacen uso frecuente de las tarjetas del Metro.

“Esta nueva opción de recarga brinda la posibilidad de no tener que realizar el proceso en máquinas de recarga, ni en puntos de venta, pues ahora es posible hacerlo desde el celular con DaviPlata”, manifestó la compañía por medio de un comunicado de prensa.

METRO DE MEDELLIN ESTACIONES | Foto: Diego Andrés Zuluaga

Solo es importante contar con saldo disponible en la billetera digital del banco. Luego seleccionar la opción de movilidad en la tienda virtual y, posteriormente, ingresar el número de la tarjeta o el número de identificación del propietario del documento.

En ese momento debe incluir el valor que desea recargar, cuyo valor mínimo es de 500 pesos. Una vez tenga el visto bueno de la aplicación, podrá hacer uso de la cívica en los puntos de recaudo de todo el sistema que opera en el Área Metropolitana.

Por otro lado, el Metro de Medellín anunció que, por primera vez en su historia, emitirá bonos sostenibles en el mercado de valores para garantizar la sostenibilidad financiera que está en jaque desde el confinamiento que ordenaron las autoridades por el covid – 19.

El mecanismo se formulará en el mercado de valores por 350 mil millones de pesos con los que espera apalancar varios proyectos estratégicos en el corto y mediano plazo. Es decir, solicitará préstamo por esa cantidad de dinero y gozará de un plazo establecido para subsanar la deuda.

Tranvía de Medellín. | Foto: Getty Images

Esta flexibilidad en los créditos la disfrutan las empresas que tienen los estándares más altos en gestión y administración en Colombia y el resto del mundo. Al acceder al mercado de valores, se encontrará con más plata, cuyos costos de financiación son más bajos.

Otra de las ventajas es que los plazos para cancelar los compromisos pueden ser más largos a los que se definen en el mercado financiero tradicional. “Esto se traduce en cuotas para pago de la deuda más convenientes y acordes al flujo de caja de la empresa”.

La compañía indicó que, de acuerdo con los planes iniciales, los bonos tendrán cinco series y su valor nominal será de un millón de pesos, con un vencimiento de entre 1 y 30 años a partir de la fecha de emisión, que espera ordenar cuando encuentre la oportunidad.

Ahora bien, se aclaró que el pago de capital e intereses se realizará en pesos y la tasa máxima de rentabilidad de los bonos para cada subserie será definida por el Ministerio de Hacienda, así se aprobó en un análisis riguroso que se extendió durante 24 meses.

Metrocables de Medellín. | Foto: DIEGO ANDRES ZULUAGA

El Metro de Medellín también informó que, “al ser esta operación una modalidad de crédito, no representa un cambio accionario o de participación en las acciones para sus propietarios, Distrito y Gobernación de Antioquia, por lo tanto, no es una privatización”.

El dinero que se espera recibir con la emisión de los bonos se destinará exclusivamente para los proyectos sostenibles del sistema masivo de transporte del Valle de Aburrá. Es decir, que puedan llegar a tener un impacto tanto ambiental como social.