El hombre de 27 años que fue diagnosticado con la viruela del mono en la capital de Antioquia se recuperó de la enfermedad luego de estar aislado por 21 días. Junto a él, 32 personas fueron confinadas por haber tenido contacto físico.

De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Salud de Medellín, hasta el momento solo se ha confirmado una prueba positiva del brote en un paisa que llegó de Barcelona luego de disfrutar de un viaje turístico.

Se trata de una persona que acudió a un centro médico de la ciudad cuando presentó los primeros síntomas de malestar al tocar suelo colombiano: fiebre, escalofríos, cefalea, dolor ocular, fatiga y lesiones eruptivas en la piel, primeras advertencias de la viruela.

“En Medellín tenemos un solo caso que ya se recuperó, fue leve, todo supremamente bien. 32 casos fueron el cerco epidemiológico, pero todo bajo control. Es una alerta epidemiológica que le vamos a seguir haciendo seguimiento”, reveló la secretaria de Salud, Andree Uribe Montoya.

Entre las personas que guardaron cuarentena figura el personal de salud que atendió al paciente en el barrio El Poblado, los pasajeros que venían en el mismo vuelo que llegó al aeropuerto desde Europa y los familiares del hombre.

La cartera sanitaria reveló que, antes de que el Instituto Nacional de Salud les revelara el diagnóstico del enfermo, en la ciudad ya se había activado el plan de seguridad para contener la propagación de la viruela del mono.

“Fue muy ‘charro’ porque, cuando nos llamaron de Bogotá, ya estábamos con él. Bogotá nos llama y nos dice: confirmamos, y nosotros: ya estamos con él, hicimos la investigación y tenemos el equipo en campo”, agregó la funcionaria de la Alcaldía.

Tras este caso, la dependencia aseguró que cuenta con el conocimiento y la experiencia técnica para atender nuevos contagios con el fin de frenarle el paso a la enfermedad, cuyo cuadro clínico es similar al de la varicela.

El Ministerio de Salud dio un parte de tranquilidad porque la viruela no suele considerarse muy contagiosa porque requiere de un contacto físico estrecho con alguien infeccioso para propagarse entre las personas.

Los primeros signos suelen comenzar entre uno y tres días después del inicio de la fiebre. Las lesiones pueden ser planas o ligeramente elevadas, llenas de líquido claro o amarillento, y luego pueden formar una costra, secarse y caerse.

Según los casos atendidos en el mundo, en su mayoría, los síntomas desaparecen por sí solos en unas pocas semanas, pero en algunas personas pueden provocar complicaciones médicas e incluso la muerte.

Franklyn Prieto, director de vigilancia en salud pública del Instituto Nacional de Salud, reveló que desde el 19 de marzo entregó los lineamientos para redoblar la vigilancia con el fin de detectar los contagios a tiempo.

“Se mantiene la indicación de revisar signos de la viruela símica en personas con nexo epidemiológico con un caso confirmado o probable, o con antecedentes de desplazamiento a ciudades donde se han confirmado brotes, como con antecedente de viaje a zonas endémicas”, afirmó el especialista.

En Colombia se han diagnosticado cinco casos de infección en Bogotá y Medellín. El último hallazgo se dio en la capital de país en dos hombres, uno de ellos llegó desde Europa y el otro se contagió en Colombia.

Los dos casos permanecen aislados y se les ha dado manejo ambulatorio. La Secretaría de Salud de Bogotá, entidad territorial que realizó la investigación epidemiológica de campo correspondiente y el cerco epidemiológico a los contactos identificados.

Preliminarmente, las autoridades sanitarias mantienen el seguimiento a las personas que tuvieron relación con el paciente que tiene el antecedente de viaje y el otro infectado que niega haber salido del país y tener contacto con alguien que lo haya hecho en las últimas semanas.