Una nueva imprudencia en los ejes viales de Antioquia tiene en alerta a las autoridades locales. En las últimas horas se conoció un video donde se observa a un grupo de jóvenes sobre el techo de un taxi que estaba en movimiento. El hecho se presentó en las inmediaciones del Área Metropolitana.
De acuerdo con la información que ha circulado en las redes sociales, la maniobra peligrosa se registró en una de las vías del corregimiento San Félix del municipio de Bello, ubicado en el norte del Valle de Aburrá. Una de las personas que se movilizaba por el sector sacó su celular para registrar a los jóvenes que, visiblemente, disfrutaban del reto.
Un hombre y una mujer estaban sobre la capota sin elementos de protección en horas de la noche del pasado miércoles, con sus cuerpos solo sujetados a las bases metálicas que están instaladas en la parte superior del automotor. A la par, el conductor no estaba en su asiento, sino en la mitad, dado que otro personaje estaba sentado sobre su puesto.
En un fragmento de la grabación se ve a la joven tomar su teléfono para captar fotografías de la escena que estaba protagonizado junto a sus acompañantes. Ahora bien, en medio del video, el denunciante dio cuenta de la situación que estaba presenciando: “¿Ese conductor qué? Esos paisas no aprenden. Miren esa irresponsabilidad de los jóvenes”.
Las personas que han observado las imágenes les piden a las autoridades que inicien un proceso judicial por la imprudencia a razón de que la vida de los ciudadanos que se transportaban por el sitio pudo estar en riesgo porque no había control en el automotor. “Está clara la placa para que suspendan ese peligro”, se lee en los comentarios.
Frente a esta denuncia pública, se desconoce si la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional abrió una investigación para dar con el paradero de las personas involucradas.
Otro dolor de cabeza: piques ilegales
Una cita acordada en las redes sociales y la disposición de perder la vida en las carreteras de Antioquia son los elementos que hoy preocupan a las autoridades, así definió la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional el fenómeno de los piques ilegales que hoy cobran víctimas en varios municipios del departamento y Medellín.
Las maniobras peligrosas se realizan en motocicletas y bicicletas, los jóvenes son los protagonistas más frecuentes. El escenario preferido por las personas que toman las riendas de las manillas son terrenos planos donde los radares de los integrantes de las secretarías de Movilidad no alcancen a llegar a razón de que tienen el permiso de penalizarlos.
En lo que va corrido de 2022, en la ciudad se han impuesto 1.483 comparendos que relacionan estas prácticas peligrosas. Buena parte de las multas se han aplicado por las quejas de los vecinos que padecen los ruidos nocturnos de los vehículos y los controles semanales que la administración distrital ordenó activar en los sectores más vulnerables.
El comandante de Tránsito de Medellín, Luis Fernando Vanegas, detalló que en 74 operativos han sorprendido a los ocupantes de 457 motocicletas y 58 carros, varios de ellos fueron inmovilizados. Para liberarlos de los patios de la Alcaldía, los propietarios tuvieron que entregar una cantidad de dinero que fue definida con base en las irregularidades cometidas.
“Las Palmas y el puente de la 4 Sur son los sitios donde más se frecuenta esta práctica. Sin embargo, se han identificado otros sitios como el puente de La Asomadera y Aranjuez, donde la comunidad ha solicitado que hagamos controles permanentes con nuestros agentes de tránsito, apoyados por la Policía Nacional y el Ejército”, indicó el funcionario.